El Gobierno de Canarias ha destacado que las islas son pioneras en la aplicación de nuevas tecnologías en el cultivo de papaya, según ha informado el Ejecutivo regional en un comunicado.

Este lunes el consejero de Agricultura, Ganadería, Pesca y Aguas, Narvay Quintero, realizó una visita a fincas de esta fruta tropical de la empresa Conagrican, con la que colabora el Instituto Canario de Investigaciones Agrarias (ICIA) para el desarrollo de un proyecto de I+D+i.

Durante el encuentro, en el que estuvo acompañado por uno de los administradores de la empresa, Juan Carlos Santiago, el presidente del Instituto Canario de Investigaciones Agrarias (ICIA), Juan Francisco Padrón, el investigador del ICIA, Juan Cabrera, y el técnico de Conagrican, Eduardo García, se puso de manifiesto el potencial de este cultivo en el archipiélago cuya producción se destina actualmente al mercado interior y también a la exportación.

UNOS 2,3 MILLONES DE KILOS PRODUCIDOS EN 2017

Por su parte, esta empresa es uno de los principales productores de papaya de Canarias y de España, con 2,3 millones de kilos en 2017. Lidera además la producción de plátano en el Archipiélago y produce, a menor escala, piña tropical, aguacate, mango, naranja, y café del Valle de Agaete.

Conagrican, con el apoyo financiero del Centro para el Desarrollo Tecnológico Industrial (CDTI) desarrolla desde febrero del 2017 un proyecto dirigido al estudio de cuatro variedades distintas de papaya bajo invernadero con la implantación de nuevas tecnologías de control ambiental y manejo diferenciado de la fertilización.

Aquí, Quintero ha destacado que Canarias "es la mejor zona de Europa para cultivos tropicales y subtropicales" y de ahí la importancia de este "proyecto pionero, que nos proporcionará datos para mejorar la rentabilidad de los cultivos".

Además, el consejero puso este trabajo como "ejemplo de innovación y modernización de este cultivo y su comercialización de cara al mercado interior sino también al exterior".

SE TRABAJA SOBRE CUATRO VARIEDADES DE LA FRUTA

El investigador del ICIA Juan Cabrera ha explicado que este trabajo se realiza sobre cuatro variedades de esta fruta y estudia las condiciones en invernadero "para que pasen el invierno y la época de mayor calor en verano en las mejores condiciones posible".

En este sentido, la iniciativa brinda la oportunidad de seguir avanzando en los trabajos de investigación encaminados a lograr mantener la calidad de la papaya en invierno conservando los niveles de azúcar que demandan los consumidores. En esa época éstos descienden debido a los picos en temperatura que se producen durante estos meses de más frío que afectan a las plantas, y de cuyos resultados se verá beneficiado todo el sector productor.

Así, los investigadores emplean la nebulización (niebla) para aumentar la humedad relativa en los invernaderos y también para la aplicación de productos fitosanitarios, en los que se busca que sean cada vez más eficientes y respetuosos con el medio ambiente, los agricultores y la salud de los consumidores.

Asimismo, estudian diferentes aspectos vinculados a la fertilización y calidad del agua, que también afectan a la calidad de los frutos, y, en cuanto a los trabajos en postcosecha se llevan a cabo simulaciones en cámaras frigoríficas con producciones recogidas en distintas fechas para evaluar distintos parámetros como la acidez, dureza de la pulpa, etc., analizando la calidad del producto final cuando llega al consumidor.