Las instrucciones para que los profesionales puedan indicar los sistemas de monitorización flash y continua de glucosa están a punto de empezar a repartirse.

Esto significará que cualquier paciente, que entre dentro de los requisitos, podrá solicitar estos aparatos. El más sencillo de gestionar es el sistema flash de monitorización continua de glucosa en el líquido intersticial, que se podrá solicitar en el servicio de endocrinología de referencia. Estos sistemas aportan información de un periodo de tiempo y son especialmente útiles en niños y adolescentes con diabetes tipo 1. Por eso, estos aparatos están prescritos para pacientes de entre 4 y 18 años que "requieran múltiples dosis de insulina y más de 6 controles de glucemia al día, con niveles de HbA1c controlados y sin hipoglucemias frecuentes".

Por su parte, los sistemas de monitorización continua de glucosa, se deberán implantar y solicitar, al igual que las bombas de infusión continua de insulina, en los servicios de endocrinología y pediatría de los hospitales de las Islas, incluidas las no capitalinas. El monitor está prescrito para pacientes de diabetes tipo 1, mayores de 4 años y menores de 18 que no puedan usar sistemas flash, y para menores de 4 años que "tras seis meses de tratamiento con inyecciones múltiples o tras la colocación de la bomba de insulina, no hayan conseguido control metabólico", a aquellos que presenten "inestabilidad glucémica o perfil glucémico caótico" o "cuando se objetiva dificultades graves de control nocturno".