La crisis, la restricción de las ayudas, la competencia de Marruecos y la obligación de devolver las compensaciones al transporte -luego rectificada mediante una sentencia judicial que dio la razón al sector- han diezmado la producción de tomate en Canarias y la cifra de empresas dedicadas a su cultivo y comercialización. Ahora, la convocatoria de las ayudas del Posei adicional correspondiente a 2011 permite respirar a los tomateros que continúan en activo e incluso trazar planes más ambiciosos. El alivio y la satisfacción no esconden, sin embargo, que alrededor del 70% de las empresas y cooperativas que existían ese año -35 de 50, según los cálculos del sector- se ha quedado "en el camino".

El consejero de Agricultura del Gobierno regional, Narvay Quintero, anunció ayer la firma de la convocatoria y su próxima publicación -la semana que viene-, una medida con la que el Ejecutivo cumple su compromiso de abonar todas las cantidades del Posei adicional pendientes de pago. En el caso del importe de 2011 para el tomate, son 8,5 millones de euros que el Gobierno procurará pagar antes de que termine el año.

Quintero recalcó que el compromiso con el sector era doble: liquidar el Posei adicional -que durante años el Gobierno autonómico tuvo que financiar en solitario después de que el Estado retirase su aportación- y asegurar las compensaciones al transporte, que se abonan con carácter retroactivo desde 2016. "Queda camino, pero hemos sentado las bases para cobrar las ayudas en tiempo y forma", dijo el consejero.

Por su parte, el presidente de la patronal de Las Palmas (Fedex), Juan José Bonny, recibió la convocatoria como una "gran noticia". "Nos ayuda a afrontar con mucho optimismo la campaña y algunos incluso nos planteamos aumentar la superficie de producción", señaló Bonny quien, no obstante, ve "muy difícil" que quienes llevan "cuatro o cinco años sin sembrar" puedan reincorporarse a la actividad.

Su homólogo en la asociación de Tenerife (Aceto), Francisco Echandi, también agradeció la gestión de la Consejería y recordó a los productores que han tenido que abandonar el tomate. "Otros compañeros -lamentó- no han podido llegar".