La empresa encargada de la gestión del Servicio Municipal de Aguas de Ingenio (Gran Canaria), Aqualia, ha asegurado este martes que "no" existe vertido de aguas residuales en el barranco de Malfú, en el citado municipio.

De este modo, Aqualia ha querido desmentir a través de un comunicado, dirigido al Ayuntamiento de Ingenio, que se hayan producido vertidos "incontrolados de aguas residuales procedentes de la Estación de Bombeo de Aguas Residuales (EBAR)" en el citado barranco, a su paso por el Polígono Industrial de Las Majoreras, la pasada semana, según informó la empresa en nota de prensa.

En este sentido, aseguran que ante las informaciones aparecidas en las que el colectivo La Vinca Ecologistas en Acción denunciaba un vertido de aguas residuales en el barranco de Malfú, técnicos del Ayuntamiento de Ingenio, así como el jefe de Servicio de Aqualia "pudieron comprobar que el vertido de aguas residuales de la EBAR las Majoreras no existía".

Asimismo, indican que la EBAR se encuentra actualmente "a pleno funcionamiento". En relación con ello, han querido recordar la necesidad de concienciar a la población sobre "un problema de rigurosa actualidad existente en todas las redes de saneamiento, en concreto, en las estaciones de bombeo de aguas residuales como la de Las Majoreras".

Al respecto, exponen que estas infraestructuras se encuentran "sometidas diariamente a un excesivo trabajo debido a la utilización masiva de toallitas húmedas en los hogares", lo que indicó provoca una "acumulación de fibras y tejidos en las tuberías de saneamiento, causantes de estos enormes atascos, bloqueos, roturas internas por calentamientos", entre otros, en las tuberías y en los equipos de bombeo encargados de impulsar el agua residual hacia la planta depuradora.

Por ello, puntualizan, que con el fin de promover este tipo de conductas "responsables", el Ayuntamiento y Aqualia lanzaron el pasado verano la campaña ''No lo tires'' en la que a través de banners y un folleto insertado en la factura del agua de todos los ciudadanos, se advertía de las consecuencias negativas de arrojar residuos al inodoro (toallitas, aceites o fármacos).

De este modo, afirman, Aqualia muestra "su preocupación por mejorar la calidad" del servicio prestado y en relación a las toallitas recuerda que una conducta "responsable en el uso del agua debe ir encaminada no sólo a un consumo racional del recurso, sino a la correcta devolución del mismo a su entorno natural con todas" las garantías de sostenibilidad.