Las demandas por discriminación salarial entre sexos en hoteles tinerfeños han llegado al Tribunal Supremo (TS), que ha concluido que ese trato desigual existe, aunque la sentencia se produce cuando un nuevo convenio colectivo provincial puede evitar que tenga que aplicarse.

El alto tribunal ha confirmado un fallo anterior del Tribunal Superior de Justicia de Canarias (TSJC) que aceptaba los argumentos de CCOO, que entendía que el pacto salarial firmado por la dirección y los representantes de los trabajadores del hotel Best Tenerife, en el sur de la Isla, discriminaba a las camareras de piso -un colectivo conformado de forma muy mayoritaria por mujeres- al asignarles un plus de productividad inferior al de otros empleados encuadrados en el mismo grupo retributivo, caso de los camareros (o camareras) de restaurante o bar.

El nuevo convenio colectivo -en vigor desde octubre y firmado por Ashotel, la patronal turística de la provincia, y Sindicalistas de Base (SB), el sindicato mayoritario, y rechazado por CCOO y UGT- modifica los grupos profesionales, situando a camareras de piso y camareros de bar en áreas diferentes, y establece que los pactos salariales que acuerden los hoteles y los comités de empresa deben ajustarse a la nueva estructura. Los establecimientos ya han comenzado a renegociar sus pactos con los representantes de los trabajadores, un trabajo que deberá estar finalizado antes de que termine el año.

Según Manuel Fitas, dirigente de SB, 68 hoteles en los que su organización tiene la representación mayoritaria se han embarcado ya en la adaptación de los acuerdos salariales al convenio colectivo, un proceso que, a su juicio, convierte en "papel mojado" la sentencia. El sindicato actúa también en otros 34 establecimientos donde ni se aplica el porcentaje de servicios -un sistema anterior de distribución de los pluses- ni hay pactos salariales, por lo que sus empleados solo cobran el salario base.

También Juan Pablo González, gerente de Ashotel, sostiene que el fallo del TS "no es aplicable" al estar en vigor el nuevo convenio del sector. La patronal propone, además, que se elimine el plus de productividad y se sustituya por pluses que premien aspectos concretos, como el dominio de idiomas, el trabajo por turnos o el manejo de moneda. Son estos factores los que explicaban que, en el marco de los pactos salariales, los camareros de bar y restaurante percibieran complementos superiores a los de las camareras de piso pese a tener, con el anterior convenio, el mismo salario base.

El Supremo debe examinar aún dos casos

La del hotel Best Tenerife es la primera demanda interpuesta por CCOO por discriminación salarial entre sexos en hoteles de Tenerife que llega al Tribunal Supremo (TS), que ha rechazado los recursos presentados por la empresa y por Sindicalistas de Base (SB), organización que ostenta la representación mayoritaria en el establecimiento y que firmó el pacto salarial ahora anulado. Otras dos sentencias dictadas por el Tribunal Superior de Justicia de Canarias (TSJC) en casos similares esperan a ser examinados por el TS.

Comisiones Obreras no comparte que el nuevo convenio colectivo provincial de hostelería elimine el trato desigual hacia colectivos laborales "feminizados", como es el de las camareras de piso. La organización sindical entiende que el acuerdo "ahonda en el carácter discriminatorio" de los pactos salariales, puesto que a su juicio se basa en el sistema de reparto "franquista" de las propinas.

El nuevo convenio -firmado por Ashotel y SB y rechazado por CCOO y UGT- reorganiza la estructura profesional de los establecimientos hoteleros siguiendo el acuerdo laboral de la hostelería, de carácter nacional. De esta manera, camareros de bar y restaurante y camareras de piso dejan de estar encuadrados en el mismo grupo salarial, por lo que ya no perciben el mismo sueldo base, aunque al personal de pisos y habitaciones no se le rebajan sus retribuciones -al contrario, se suben, como para el conjunto de las plantillas- en relación al anterior acuerdo.

Los pactos salariales son acuerdos entre empresas y trabajadores que se aplican en la mayoría de los establecimientos y que permiten elevar -hasta un 20%- los salarios base recogidos en el convenio. En el marco de estos pactos se negocian los cuestionados pluses de productividad.