El presidente de Canarias, Fernando Clavijo, ha afirmado hoy que su situación de aforado no ha sido un privilegio sino que le ha perjudicado porque no ha podido "abrir la boca" durante dos años, hasta que se aprobó la modificación del Estatuto de Autonomía y perdió ese privilegio.

El presidente, en respuesta a dos preguntas de Nueva Canaria y PSOE en el pleno del Parlamento canario sobre el caso Grúas, ha comentado que "ahora", tras la aprobación del nuevo Estatuto, es cuando ha podido ejercer su "legítima defensa" al considerar que la Fiscalía ha dilatado de forma "inexplicable" el proceso relativo al caso.

"El aforamiento no ha sido privilegio; me ha perjudicado", ha aseverado Clavijo, quien ha aclarado que no ha cuestionado el papel de la justicia sino que ha pedido a la Fiscalía que informe sobre el fondo del asunto, es decir, sobre si imputa o no al presidente por una actuación cuando era alcalde de La Laguna.

Además, ha aclarado que ha presentado un escrito en el Tribunal Superior de Justicia de Canarias (TSJC) donde pone de manifiesto el retraso "inexplicable" de la Fiscalía como "ciudadano" y que el consejero de Justicia, José Miguel Barragán, lo ha defendido como "secretario general de un partido político".

Clavijo ha asegurado que si no fuese presidente del Gobierno, Nueva Canarias y Podemos no hubiesen presentado una denuncia, cuyo objetivo ha dicho que es dañar su imagen de cara a las próximas elecciones.

Ha reconocido que no sabe separar su condición de presidente de la de ciudadano y ha insistido que es presidente "pero también un ciudadano" que defiende su derecho de legítima defensa, mientras "otros" intentan enturbiar.

El portavoz parlamentario de Nueva Canarias, Román Rodríguez, ha mostrado su preocupación porque Clavijo haya dicho que la Fiscalía ha retrasado de manera maliciosa su informe sobre el caso Grúas.

"Me preocupa que se expresen dudas sobre la independencia de la Fiscalía", ha manifestado Román Rodríguez, quien ha criticado que "las máximas autoridades" políticas de Canarias, como son su presidente y el consejero de Justicia, José Miguel Barragán, hayan expresado sus dudas sobre la independencia de la Fiscalía.

Para Rodríguez, es inseparable la figura de Clavijo a su condición de presidente y de Barragán como "ministro de Justicia".

Asimismo, el portavoz de Nueva Canaria ha admitido que le inquieta la imagen del presidente y de la institución que preside al haber hecho públicas sus dudas sobre la imparcialidad de los poderes del Estado en el ámbito de Canarias.

La portavoz parlamentaria del PSOE, Dolores Corujo, ha recordado a Clavijo que "bastantes privilegios ha tenido con el aforamiento como para ahora marcarle los plazos a la justicia", que si es lenta lo es para todos y no solo para el presidente.

Dolores Corujo ha ironizado sobre "la pareja de justicieros" que hacen Clavijo y Barragán, quienes salen "en comandita", como si fuesen Batman y Robin o el Quijote y Sancho Panza, "golpeando a los gigantes" y acusando a la Fiscalía de un retraso intencionado, lo que refleja, en su opinión, "una prisa indecente".

A juicio de Clavijo, esta comparación, aunque pueda parecerle jocosa a la diputada del PSOE, es desagradable y de mal gusto, además de que "no viene al caso".

La portavoz socialista ha vuelto a pedir la salida de Barragán como consejero de Justicia por insinuar "la existencia de una mano negra del Gobierno de España" y ha calificado de impropio de un presidente de un Ejecutivo el comportamiento de Clavijo.