El grupo Nacionalista Canario defenderá en el pleno del Parlamento de Canarias que comienza el 15 de enero una proposición no de ley para pedir el cese de las grandes maniobras militares en Fuerteventura por su incidencia medioambiental y molestias a la población.

La proposición ha sido elaborada por los diputados Mario Cabrera, Nereida Calero y Dolores García, precisa el grupo Nacionalista en un comunicado, y en ella se insta al Gobierno de Canarias a plantear al Ministerio de Defensa crear y convocar un grupo de trabajo sobre el campo de tiro de Pájara.

Este grupo estaría integrado por representantes de instituciones locales, Gobierno de Canarias y el propio Ministerio para estudiar la suspensión de su proyectada ampliación, su cierre definitivo, y el traslado de sus actividades a otros recintos que ocasionen menos problemas.

Asimismo se propone iniciar un proceso de reversión de lo que hoy es el campamento Teniente Coronel Valenzuela, para permitir el desarrollo del Plan director del aeropuerto de Fuerteventura.

Hay que tener en cuenta que la isla de Fuerteventura destina alrededor de 45 millones de metros cuadrados de su territorio a instalaciones y terrenos militares que, frecuentemente, son empleados para maniobras y ejercicios de diverso tipo.

Esta superficie está mayoritariamente distribuida entre el campo de tiro de Pájara, el campamento Valenzuela y el cuartel del Puerto de Rosario; además de la estación de antenas en la montaña de la Muda, en el espacio natural protegido de Vallebrón.

En el entorno rural estas instalaciones inciden directamente sobre las costumbres y usos tradiciones de la población y en el ámbito urbano en Fuerteventura, no se ha dado la reducción de presencia militar que se ha producido en el resto del Estado, donde estas instalaciones han pasado a uso civil o, con titularidad militar, a desarrollar fines asociados a la cultura, explican los parlamentarios.