Los juzgados canarios acogerán a víctimas de violencia machista y menores de edad en "entornos protegidos" para no agravar sus traumas, en una iniciativa presentada este viernes como "absolutamente innovadora" en España. Por ahora, este sistema solo funciona en la Ciudad de la Justicia de Las Palmas. Y se proyectan crear tales recintos en juzgados de Tenerife y Fuerteventura.

La iniciativa incluye la creación de salas de espera "amables", acondicionadas con confortables sofás, decoradas para hacer más llevadera la estancia en sede judicial y hasta con alfombras de actividades y juguetes para los niños, así como recintos separados donde declarar sin ser visto ni tener que contemplar al agresor.

En lo referente a menores, ese objetivo ya se ha conseguido en la Ciudad de la Justicia de Las Palmas, merced a la instalación de una "sala Gesel", donde víctimas o testigos no adultos que están en una habitación pueden ser interrogados por jueces o abogados situados en otra anexa. Para hacerlo posible la sala se ha equipado con cámaras y micrófonos que captan las palabras y las expresiones de quienes han sido objeto de un delito y las transmiten de una habitación a la de al lado, donde una ventana que por la otra parte es un espejo, pantallas y altavoces las muestran a los operadores jurídicos. Estos tienen opción a formular preguntas a los chicos, si se considera conveniente, planteándolas desde un micrófono conectado a un auricular que lleva un profesional, generalmente un psicólogo. Todo ello desde el propósito de que los niños que han padecido un mal "no tengan que enfrentarse a su agresor ni al tribunal", con el consiguiente agravamiento de la experiencia traumática que atraviesan.

Itinerarios para cruzarse con muy poca gente

El objetivo es "evitar una victimización secundaria" de esos chicos, haciendo que su paso por los juzgados sea lo más rápido y menos desagradable posible a fin de facilitar su recuperación tras sus padecimientos. Así lo expuso ayer el decano de los jueces de Las Palmas, Óscar González, al presentar a los medios algunas de las instalaciones ideadas en el marco de ese proyecto que ya funciona o está a punto de hacerlo en la Ciudad de la Justicia. Actuando como guía en un recorrido por esas dependencias, el magistrado destacó que la iniciativa se ha acompañado del diseño de itinerarios apartados para que mujeres o niños maltratados se crucen con el menor número posible de gente. En el acto estuvo también el director general de Relaciones con la Administración de Justicia, Cesáreo Rodríguez Santos.