¡HEMOS INVENTADO EL CARNAVAL DE DÍA! No pueden ser más singuangos en la cosa esa del OAC, que ya no se acuerdan de que ya lo teníamos, y el de tarde, ¿y en qué se diferencia? Pues en que ahora nos ponen unos DJ''s y al del polvorete. Hace ya bastantes años que en la cosa organizativa impera lo que sea rentable, y no se les cae la cara de vergüenza por decirlo. Para muestra, lo de la final de murgas en el estadio, ¿para dar más cabida o para vender más entradas? Y las murgas a tragar y aguantar otra improvisación más, pero no protesten, que la culpa es también vuestra, el que se tira los p... termina pagándolo, mucha gente se fue para verlo mejor por la televisión y después de haber pasado por taquilla, ¿les parece bien la faena? ¿quién ganó más? Otro aspecto muy importante que ha creado la desaparición de grupos, y otros al caer, es la proliferación de los que llamo ¡mercenarios de la música! Que no mueven una paja si no es cobrando, letristas murgueros, músicos, directores, arreglistas, coristas etc. No culpo al que quiere o pretende cobrar por su trabajo, faltaría, pero tampoco había una necesidad perentoria de hacerlo, y no fue para modernizarse o para innovar, en gran parte solo los movía la idea de pisar a otros, ganar premios, pero como el presupuesto y la razón es solo de cara al concurso, todo el resto de la fiesta los podemos ver muy mermados de componentes y metiendo play back''s en sus actuaciones, agrupaciones musicales que se convierten en mini comparsas, rondallas en parrandas romeras, comparsas en ballets con batucadas etc. Lo cierto, es que se ha perdido mucho más de lo que se ha ganado con la fórmula de modernizarlo todo, así murió aquel carnaval desinteresado, elaborado con corazón y sacrificio, por verdadero amor al arte como se suele decir. Esta marea de "componentes a sueldo" está tocando a todos, ya no se escapa nadie, pues hasta en las rondallas se pagan músicos solistas y coristas desde hace tiempo, lo que hace insostenible seguir adelante, pues lo poco que pueden generar durante el año con el escaso programa de actuaciones que realizan, ni de broma podrán soportarlo por mucho tiempo, en cuanto se cansen (como digo yo) los cuatro viejit@s que quedan, pues adiós a algo único, genuino y representativo de nuestro carnaval, poco a poco irán cayendo sin solución de continuidad, salvo que saquen músicos de las oficinas del INEM, cosa que, estoy seguro, no le disgustaría al señor Paulino Rivero y al señor Rajoy, ¿no creen? Agradezco la oportunidad que me ha brindado EL DÍA para contarles algo sobre nuestro carnaval, y como solo ya me queda opinar sobre el futuro carnaval, si los queridos lectores me lo permiten, le pondré un color para definirlo (morado tirando a negro), pero, ¡eso sí!, con muchas lentejuelas. Feliz carnaval a tod@s.