La presentación de la antología del mundo Warner protagonizó anoche los primeros minutos, como si del estreno de la nueva producción de la factoría se tratara, en este caso dedicada al Carnaval. La espectacularidad de la obertura tuvo una protagonista: la pantalla multimedia, que hizo transportar al público a un carnaval idílico, una gala de gran calidad que fue perdiendo fuelle con las horas.

Arrancó el cuento con dos princesas. La primera, Soraya Rodríguez, reina del Carnaval 2013, que salió bailando al ritmo de Anastasia, con carroza de Cenicienta incluida. Precisamente Cenicienta. Y a partir de ahí, muchas canciones infantiles que recordaron la tierna infancia. Chaxiraxi, con el fondo del mar o Gabi Ferrer, con una espectacular coreografía, entre la pantalla y el juego de las banderas rosadas. Tras la última proyección de Barbie, como si de otro estreno se tratara, recuerdo a Tadeo Jones. Fue una obertura mágica y cargada de emotividad, por el recuerdo y, sobre todo, por el vértigo del multimedia. Y el inicio de la gala, modelo último estreno de la Warner, combinó la producción de la factoría con la creatividad y el ingenio de Mamelucos, capaces de medirse hasta con el mismísimo Bugs Bonny o el Pato Lucas.

La puesta en escena de la cuadra romana de Mamels, con Pedro al frente, retrotrajo aquellos "skecht" de la época de Jaime Azpilicueta. Con exquisita musicalidad e ingenio crítico. La obertura iba a más. Con Joroperos, Danzarines, Tabajaras... hasta Tenaro, con el Rey León. Por ponerle un pero, solo le faltó Trapaseros y su parafernalia. Hubiera sido lo máximo.

Excelente inicio del espectáculo de promoción Warner en el Carnaval de Tenerife. A partir de ahí, la velada decayó. Presentación de los conductores del acto y homenaje a Saida Prieto, la aspirante que el año pasado resultó herida con quemaduras. Anoche no bastó con la ovación que el público le dio cuando entró al recinto ferial para colocarse en la tribuna de invitados, sino que luego se hizo un alto y, como si fuera otra de las princesas del cuento infantil inaugural, el alcalde le entregó un ramo de flores. No hizo falta música de "La Bella y la bestia" ni de ninguna otra serie. El homenaje a Saida tuvo como fondo la batucada de Cariocas, su comparsa. Y colorín, colorado... la obertura se acabó. Y la magia también porque el multimedia rebajó su protagonismo.

Maestro de ceremonia fue ayer Miguel Ángel Daswani, convertido en el particular "Jorge Javier Vázquez" de Carmen Alcayde, presentadora de Mediaset, que fuera conocida por "Aquí hay tomate". Y ella no se cortó para mandar a parar a Dawasni, cuando iba a marcar el inicio del desfile. El director de la gala, por el pinganillo, advertía que los presentadores se habían olvidado de dar paso a la reina del Carnaval 2013, Soraya Rodríguez, que ya había salido en la obertura en el papel de Anastasia. Carmen Alcayde la presentó y ella salió con un diseño de Marcos Marrero y María Díaz, sentada en un butacón. El público, con el corazón partido, entre Saida y Soraya. Dos princesas de un mismo cuento.

Del frenesí de la promoción Warner en el Carnaval, último estreno de la factoría que se celebró anoche en el recinto ferial, al Carnaval chicharrero, de la mano de las protagonistas de la velada. Las dieciséis reinas participantes.

"Entre 150 y 200 kilos pesan esos trajes", comentaron Daswani y Alcayde después del pase del primer bloque de aspirantes. De la primera a la quinta, con diseños de Rayco Ramírez y Javier Santana para Peña Salamanca y Agencia Matrimonial Centro Par y Manualidades Lashara; Cavi Lladó -firma que diseñó en 2013 el traje de Saida- desfiló en segundo lugar con Sara Dávila y el patrocinio de Automóviles Insulares. En tercer puesto, Nuria García, de Santi Castro, para el Centro Comercial Meridiano; seguida de Jennifer Alfonso, de Miguel Cruz y Jonathan Suárez, para Depilación Láser Canaria. Cerró el primero de los tres bloques Ana Belén Sepúlveda, con diseño de Miguel Ángel Castilla para Casa Viña Norte y Creación Floral. Más que tocados, plumas o formas, llamó la atención el "do de pecho" que dieron las candidatas para desfilar.

De las cinco primeras reinas, el primero recordó a uno del año pasado y el segundo pareció un homenaje a Willy Jorge, de quien por cierto nadie se acordó anoche... A él no le entregaron flores. De Santi Castro se esperaba mucho más; en realidad había salido el primero, el de Meridiano, y se esperaba mucho de su segundo, aún sin desfilar. También decepcionó la apuesta de Jonathan Suárez y hasta la de Miguel Ángel Castilla, que parecía con exceso de reciclaje.

Corte para la publicidad, y bajó la intensidad de la gala, de la mano de Vieja Escuela y MM Danza. Pero no fue el único momento de publicidad, pues la presentadora, Carmen Alcayde, también aprovechó para recordar que tanto su traje como el que se pondría en el momento de la coronación llevaba la firma del director de la gala, Juan Carlos Armas. No dijo si incluida en la minuta como director o era parte del atrezo. Ya se sabe, las edades y los precios... nunca se deben preguntar.

Sin el musical Warner en Carnaval, Joroperos salió al escenario con el reto de volver a elevar el ritmo. Para entonces, el espectacular multimedia se limitaba a una señal de interferencias televisivas en colores. Ya se sabe, en Carnaval, es cuestión de originalidad. Todo vale... Curiosamente, eran Joroperos, los ganadores de comparsas, y su ritmo pareció parar la gala que comenzó de forma trepidante con el musical Warner en Carnaval. Terminó Joroperos, y Carmen Alcayde aseguraba que apetecía enseñar cachas... Cuánto sabe de Carnaval. Y segundo pase de aspirantes. Hasta ese momento, todos esperaban que los diseñadores sorprendieran más.

Abrió Expedita Hernández y Rodrigo Piñeiro, con la candidata Verónica Gil que, aunque su casco recordaba el del año pasado, agradó. Y mucho. Ya en 2013 se hizo con la primera dama. Representaba a Academia de Modas Mayjo y Ferretería Chávez.

Y de una ferretería a Automóviles Nicolás Mesa, Restaurante Balcón de Higa, David y Lali Peluqueros, los patrocinadores de la candidata Suleima Martín, con diseño de David Hernándz. Una espectacular fantasía que parecía la segunda o tercera parte del Rey León, si se cuenta a Trapaseros, en 2013, y Tenaro, en la obertura de 2014. De momento, ninguna había despertado el ¡oh! de admiración y unánime para elegir a la reina por aclamación.

Siguió Ariana Mejías, de Eduardo Martín, para Vodafone, Atelier y Salón de Belleza Sedomir Rodríguez de la Sierra, que sorprendió, y eso que ayer había margen sobrado. Parecía que los trajes eran de décadas anteriores. Pequeños y algunos reciclados. Dio paso a otra de las favoritas, Amanda Perdomo, también de Daniel Pagés, para La Opinión de Tenerife y McDonald''s. Esta, según el bulo del "guasá" que corrió en las últimas dos semanas, era una de las dos favoritas para ser reina, pues el rumor le daba a Pagés la reina y una dama (el diseñador de la nueva hornada). Y por si había que comparar cuál de las dos era mejor, llegó el turno de la otra aspirante de Dani, Yolanda Mendoza, para Crearte Asociación Profesional de Artesanos Creativos de Tenerife. Dado el énfasis de Carmen Alcayde, todas parecían que, de primero, se llamaban candidata.

Y, aunque no era momento para la publicidad, llegó Caña Dulce, primer premio de Interpretación. Antes del último y tercer pase de aspirantes.

En la recta final, Itziar Marrero, de Jonathan Suárez para Comerciantes La Salud y Kuserv; siguió Naira Reyes, de Dámaso Ramos... Y en el puesto 13, número que le trajo suerte, pudo llegar la reina y a la postre primera dama, Rocío Benítez Pérez, de Santi Castro, para Asecu y Radio Club Tenerife. Además, esta firma patrocinó el traje que diseñó Willy Jorge. Esta candidata marcó otro estilo en el diseño que comenzó en ese momento. Parecían desmontajes o desplegables. Su reina, Rocío, tenía una fantasía por delante y, cuando se daba la vuelta, otra. Un traje reversible inventado por Santi Castro.

Y siguió el bloque con Noemi Hormiga, en el puesto 14, de Jorge González. Y la presentadora, en busca de hacerse la simpática, volvió a hacerse un lío por la exclamación... Un traje para empresarios: Fecao. Otro momento desplegable, con Noeimí Hormiga, de Jorge González, cuando llevó el traje y, delante del escenario, se zafó. Y se fue ella sola al público. ¿Quién dijo miedo? Hasta demostró que su cinturón de auto liberación estaba presto y dispuesto en caso de incidencia.

Siguió en este bloque de desplegables y sorpresas Alexis Santana, ganador de la reina infantil 2013 y de dos damas infantiles de este año, con Carmen Desiré García. Su traje fue un desplegable, pero ni de dos caras, como el de Santi para Radio Club, ni de demostración de cinturón de autoprotección como el de Jorge González, sino tan solo un guiño al desmontar el tocado. Un traje bonito. Y cerró el desfile Paula Delgado con un diseño de Carlos Curbelo para Grupo Nomar. Una fantasía que recordaba un poco el ayer. Sin duda, en el tercer bloque, la de Santi Castro para Radio Club partía como favorita, con Alexis Santana, Expedita Hernández, Edu Martín y Dani Pagés como candidatos para la corte.

Antes de irse a deliberar el jurado, desfiló la reina del hogar Canario Venezolano.

Dieron luego paso a la publicidad, pero en el recinto ferial Sarah Sofía brindó con Echeyde una gran actuación por su ritmo. Pena y nostalgia, sin embargo, fue lo que sembró el grupo que se presentó bajo el nombre de Ni Fú-Ni Fá, que antes cantaba "Cubanitos" y anoche interpretó un artículo de opinión con música. Para despedirse, lo que pudo ser una broma en la final, pero nunca un himno para desplazar al Cubanito: "Alcohol, alcohol, hemos venido a divertirnos y el resultado nos da igual"...

Siguió Soraya, la actuación estrella. La organización pudo utilizar las pantallas para subtitular en castellano la letra de su tema en inglés. Si el año pasado fue David Bustamente el telonero de Bambones, anoche Soraya abrió paso a los de El Cardonal. Y llegó un toque de Carnaval. El encanto de Primi Rodríguez demostró la capacidad de improsivar de los murgueros. Después de desafiar a la presentadora al público, como si no supiera nombrar y corear a Bambones -desde luego nunca los habían anunciado con acento tan godo-, Primi se la devolvió con el mismo acento. Y es que Carmen Alcayde igual hoy piensa que aquí nadie se sabe el ritmo de Bambones, una murga que lo tiene ya antes de nombrarla. Y entonaron el fantasma. Y no por la presentadora.

El multimedia, un espectáculo. La parte de la feria, con el contraste de la ciudad en blanco y negro, igual. Lástima que la especialidad de la casa, su pasacalle o despedida, quedara relegada, no se sabe para cuándo...

Y de la murga, Bambones, a Los Fregolinos. La agrupación lírico musical acompañada por orquesta, aunque ayer, con el "play back", parecieran un número de los Teleñecos, por aquello de los dibujos animados. Desdibujada su actuación, con la fuerza y el ímpetu que suele transmitir.

Con ya tres horas de espectáculo, muchos pedían tiempo. La gala había comenzado de forma trepidante, el desfile había sido decepcionante, con un tercer bloque muy superior a los dos anteriores, y el Carnaval Carnaval en sí comenzó con Bambones, tras una Fufa caricaturizada, igual que Los Fregolinos. Miguel Ángel Daswani dijo que la Fufa nació en 1950... diez años antes. Pero luego, de Los Fregolinos, dijo: "Tenemos cantera"... Un desatino.

Y momento emotivo, con el homenaje a Pedro Gómez Cuenca, al que ni siquiera le hacía falta música porque el sentimiento estaba a flor de piel. Charlot, ayer y hoy, siempre un grande del Carnaval. Precioso recuerdo. Y justo, mientras sonaba la voz grabada de doña Victoria Álvarez y El Cabito se disfrazaba de Charlot. Para ese momento ya había acabado el jurado de deliberar y, sobre el escenario, un bloque de cantantes de música latina. Un pegote. Ganas por estirar el espectáculo, que había comenzado muy bien, pero que acabó... ¡Agüita!, con el machango del cartel estampado en las batas de los cantantes de salsa.

Siguió otra actuación de Míriam Reyes, Anaé... exquisita Sarah Sofía recordando a Celia Cruz y... veredicto sorprendente, que trajo el "guasá" que estuvo pululando por los teléfonos móviles las últimas semanas.