El Recreo acogió ayer la esperada presentación en sociedad de Los Camareros de Valbanera, no son solo un grupo nuevo en el Carnaval sino, lo que va más allá, con exponentes de una modalidad inédita. ¿Su estilo? un rebumbio, que incluye teatro, murga, rondalla... "Hemos trabajado para hacer un repertorio de 45 minutos, ininterrumpido, cuyo único objetivo es hacer feliz al espectador", explica José Antonio González, El Flaco, su mentor junto a Ovidio, Pachi y un amplio grupo de entusiastas.
Anoche, "El Flaco" explicó que Los Camareros es un género innovador. "La presentación es el inicio de una ilusión de cuatro locos que aspiran a crear una tendencia". José Antonio González, quien fuera "alma mater" de Singuangos y hasta el año pasado director de Ni Fú-Ni Fá, no aspira a nacer y que el próximo año haya un concurso de rebumbios. "Partido a partido". El objetivo es gustar tanto al público como a quienes los han visto ya.
¿Más complicado que una rondalla? Con la experiencia de su paso por Tronco Verde, El Flaco evita la comparación y precisa: "Es un montaje difícil porque lleva música, coro y teatro". Incluye en las letras la ironía de las murgas, pero "no es un repertorio para pensar, sino para hacer feliz a quien lo escucha". "No está pensado para bailar, pero si al final del repertorio se animan, estupendo", añade.
Esos "45 minutos de felicidad" son ininterrupidos. De un tirón, en donde se sucede diálogo y actuación de los 55 camareros de El Flaco, en los que se distingue a once miembros del pulso y púa, la percusión y viento. "La orquesta lee música", añade.
Los Camareros son un rebumbio de Carnaval, pero no está concebido para donde haya rebumbio, sino para foros donde se pueda degustar la buena música, en especial para la familia. A la espera de que Fiestas designe los escenarios donde actuarán en el Carnaval de la Fantasía, José Antonio asegura que estarán en la calle algún día, no descarta en Cortefiel y tal vez como invitados en la Canción de la Risa. Si se tuviera que comparar, Los Camareros tienen más similitud con un coro gaditano que con una murga, pero son un rebumbio, con identidad propia, matiza El Flaco.
Cuando se le pregunta por qué cerró el ciclo de las murgas, responde tajante: "Negativo". Nunca ha descartado nada (de hecho es el autor del montaje musical de La Traviata). Otra cosa es que, de cara al Carnaval 2018 decidiera que o sacaba algo distinto o se quedaba en casa. Y nacieron Los Camareros de Valbanera.