UNO DE LOS CÁNTICOS más repetidos por los aficionados del CD Tenerife en los últimos tiempos es "Blanquiazul es un sentimiento". De hecho, hasta existe una peña de reciente creación que se ubica en Herradura Alta que se denomina Sentimiento Blanquiazul. No les falta razón a los seguidores porque el CD Tenerife, nuestro equipo, despierta mucha pasión en la Isla. Sin embargo, junto al orgullo que sentimos de ver al "Tenerifito" arriba como uno de los símbolos inconfundibles de nuestra tierra, podemos afirmar también que un Tenerife en Primera aportaría además muchas más cosas a la Isla.

A nadie se le escapa el protagonismo y la relevancia que tuvo el Tenerife en los 90, sin duda, sus mejores años, con dos participaciones en la UEFA y siendo actor principal en dos finales de Liga sumamente emocionantes. Esos logros deportivos aumentaron la autoestima de todos los tinerfeños y proyectaron la imagen de la Isla por toda Europa, con un impacto mediático impensable hasta el momento. En todos los rincones del Estado español se hablaba del Tenerife y de la Isla. Hasta Europa se rindió a los pies de un equipo de una tierra lejana para muchos -quién no recuerda al mítico entrenador del Auxerre, Guy Roux, cuando dijo que venían a jugar la UEFA a África-. Tenerife se hizo grande, muy grande, gracias a un equipo de fútbol, y eso podemos recuperarlo en unas semanas.

Sin duda, el CD Tenerife fue una gran lanzadera publicitaria para la Isla entonces y lo volverá a ser ahora si logramos el ascenso a Primera División. En la situación económica que vivimos, sería extraordinario contar con un vehículo de difusión como el Tenerife en el mercado turístico peninsular, sin olvidar que la imagen de los partidos de Primera se difunde en numerosos países europeos y de otros continentes.

He tenido la oportunidad de vivir de cerca dos ascensos del Tenerife o triunfos históricos del club como un 0-3 al Real Madrid en copa del Rey que, como muchos de ustedes saben, son cosas que no se olvidan en la vida.

Estamos ante una oportunidad histórica de recuperar el protagonismo que Tenerife se merece. Nos quedan cinco finales y tres de ellas se juegan en casa, en nuestro Heliodoro Rodríguez López, donde tantas jornadas de fútbol hemos disfrutado. El presidente, D. Miguel Concepción, los directivos, los jugadores y los técnicos se han ganado a lo largo de esta temporada el cariño, el reconocimiento y el apoyo de la afición. Los seguidores se han volcado en este tramo final de la Liga, con masivos desplazamientos a la Península que han hecho que el equipo se sintiera arropado. Nos queda un último esfuerzo y no podemos fallar. Ahora más que nunca todos al estadio. Porque sentimos blanquiazul y por muchas cosas más.

* Vicepresidente primero del Cabildo de Tenerife