La supereuropea Claudina Morales

Estoy extrañadísimo, al igual que miles de canarios, con la actitud de esta supereuropea canaria de Fuerteventura, doña Claudina Morales, que se sacaron de la manga un día en el último congreso de Coalición Canaria para que no salieran otros, y que su actitud y declaraciones ultraeuropeísta y españolista a fondo -ni que fuera goda-, como si fuera del Partido Popular, está dejando mal no sólo a CC sino a todos los canarios. Claro que los sectores de la derecha de CC han influenciado en esta majorera y la llamaron a capítulo, hasta hacerle delirar con su nuevo europeísmo, ahora que la han metido en una lista al Parlamento europeo; incluso se está creyendo su vocación europea más exaltada que López de Aguilar o Cristina Tavío, que ya es decir.

Me gustaría recordarle a esta majorera europea del tres al cuarto que fueron los europeos del siglo XV los que vinieron a estas islas en busca de esclavos y que fueron los europeos, de España sobre todo y de Normandía, los que casi arrasan con la población guanche de Lanzarote y Fuerteventura, de donde dice procede. Que la isla de Fuerteventura hubo de repoblarse con moriscos y con esclavos africanos y gentes de Lanzarote y otras islas. De ahí tantos apellidos como Morales. Y que cuando la expulsión de los moriscos de España y colonias de 1610, el Cabildo de Canarias envió un informe a la metrópoli española diciendo que si se expulsaba a los moriscos de Fuerteventura la isla quedaría deshabitada.

Todo eso lo podría encontrar en Viera y Clavijo y otros autores. En las otras Islas canarias conocemos bien quiénes fueron los europeos que vinieron a conquistar estas islas o a buscar esclavos y ahora constatamos la nueva invasión de europeos que está enviando España y Europa para destruir nuestro pueblo.

¿Y usted dice que está en un partido nacionalista canario y que es canaria? ¡Perdone que lo dude!, y sepa que ningún patriota canario le va a apoyar en sus manejos políticos, elucubraciones y engodos.

L.B.D.

Estado de bienestar

Los políticos de izquierda nos repiten frecuentemente estas palabras que definen su paraíso terrenal, pero no aclaran ni el origen de las mismas ni el mal uso que algunos dictaduras -fascista italiana, socialista soviética, nacional socialismo (nazi) alemán- hicieron en el pasado siglo XX de ésta, aparentemente, buena intención. Sorprendentemente, la idea partió de un príncipe, el estadista prusiano Otto Von Bismark (1815-1898), apodado "el Canciller de Hierro", que llevó a cabo la unificación de la moderna nación alemana en el periodo 1864-1871, proclamando en Versalles el II Imperio o Reich alemán. Monarquías como las escandinavas adoptaron, con éxito, su socialismo de Estado; mientras que, actualmente, España se debate en un cúmulo de crisis institucionales y económicas con fallos educativos y de valores fundamentales, en una era globalizada y competitiva.

Se impone que los casi 300.000 "liberados" (del trabajo) sindicales dejen de dar "cariño" al gobierno, para agradecer su "modus vivendi". Los empresarios que les pagan, lo verían con agrado y la productividad -tan necesaria- aumentaría. Y si quieren sindicarse, paguen sus cuotas, como USO. Canarias, con casi un 28% de paro, duplica la media española y triplica la europea. ¿No les parece suficiente?

José Luis Montesinos Sánchez-Real