El día 11 de junio fue elegido alcalde de Tegueste don José Manuel Molina. El acto tuvo lugar en el teatro Príncipe Felipe de la localidad. Dentro de lo que fue el evento de la investidura hay que comentar diversas impresiones. Se notaba la ausencia en la tarima del líder socialista Antonio Expósito, quien dimitió después de la debacle sufrida por su partido, fruto de una equivocada política de oposición. Era lo que cabía esperar, aunque hubiese estado mejor si antes hubiese pedido disculpas personal y públicamente. También dimitió su número cuatro.

Por otro lado, se pensaba que la variedad de grupos en la oposición podría hacer que sus concejales pudieran contribuir a una labor enriquecedora para el bien del pueblo. Pero después de terminado el acto surgieron muchas dudas al respecto.

Así, y dentro del protocolo de juramento, destacó, por su aspecto negativo, la concejal de ASSPT María Teresa Fernández, quien prometió su cargo "por imperativo legal", como hacen los de ETA. Afortunadamente, fue ignorada por todos los presentes, y lo que podía haber sido un hecho aislado se vio confirmado cuando la misma persona protagonizó una conducta muy desagradable cuando el ya elegido alcalde iba a darle la carpeta, que ya había repartido a seis concejales, y la mencionada se viró la cara, en un acto de insolencia, y tan solo en el último milisegundo decidió aceptarla. Fue, sin duda, lo peor del día y lo peor que se puede esperar de una persona y mucho más de un político ¿Por qué tenía esa cara entre enfadada y amargada? ¿Qué le habían hecho? ¿Acaso no aceptaba la decisión de todos los teguesteros expresada en las urnas? Difícil papeleta para la oposición tener que convivir con una persona antisistema y con tal nivel de fanatismo.

Le siguió en nivel el joven Daniel Villalba de XTF-XTEG, quien protagonizó el único voto nulo, como todos dedujimos, al escribir en la papeleta "democracia real ya". En fin, algo disculpable por aquello de su juventud, de su inmadurez e inexperiencia. Pero solo hasta ahí, porque las ideas no están reñidas con los buenos modales y la educación, negándose al final darle la mano al alcalde cuando le entregó su carpeta.

A otro nivel llamó la atención la edil Erika Hernández, del PSC-PSOE, quien en la toma de posesión prestó su promesa al cargo con unos tonos de voz inapropiados, con gran altivez y teatralidad muy forzada, como si con la voz quisiera golpear y decir lo contrario de lo que estaba diciendo. Mucho tiene que limar Juan González si no quiere seguir aumentando el declive socialista. Solo el tiempo nos dirá si estas impresiones de la investidura se confirman o se desmienten.

El pueblo de Tegueste siempre ha sido un pueblo inteligente y se ha caracterizado por su nobleza, y desde luego no se merece la presencia de determinados concejales rancios y anacrónicos. Pero sí que sabe, y por eso mismo los ha elegido, que la totalidad de los ediles del equipo de gobierno y su alcalde a la cabeza se caracterizan por ser personas sensatas, nobles, tolerantes y dispuestas a luchar por su pueblo. Todo un ejemplo colectivo de lo que debe ser el comportamiento humano en un político. Desde luego, que no esperen ninguna ayuda de la oposición, porque solo va a contemporizar y a destruir todo lo que pueda.

Romen

(Tegueste)

Recorte antisocial

Espero que la Ley de Igualdad de Trato referente a la educación nunca entre en vigor. Es injusta por discriminatoria y por antisocial. Es discriminatoria porque los colegios con educación diferenciada deben recibir fondos como los demás, ya que el Gobierno no debe ignorar que el dinero con el que se subvenciona la educación procede de los contribuyentes y, por tanto, debe respetar la voluntad de todos. Y es antisocial porque al dejar sin fondos la educación diferenciada muchas familias con menos recursos, pero que eligen esa opción, no podrán acceder a esos colegios.

Vicky Susiac

(Barcelona)