Todavía tiene la desvergüenza política Paulino Rivero de decir que la competencia para explorar las aguas canarias las tiene el Gobierno que preside él, pues esas aguas pertenecen a la Comunidad autónoma. Rivero es un ignorante o un cínico. Nos re- ferimos siempre a su faceta como hombre público y no a su vida privada, pues en aspectos particulares de su persona, lo decimos un día más, no entramos. Lo criticamos como político por su necedad, incompetencia y hasta ruindad. ¿No sabe todavía el presidente del Gobierno regional que esas aguas son de Marruecos? Ni de Canarias, ni de España; son marroquíes porque están en la Zona Económica Exclusiva de Marruecos; un país que, sin lugar a dudas, ejercerá sobre ellas el control que le corresponde como nación soberana. Serán aguas canarias, con la correspondiente mediana trazada de acuerdo con Marruecos en el desarrollo normal de las relaciones entre dos países soberanos, cuando seamos independientes. Es decir, cuando dejemos de ser la vil colonia de una nación situada en otro continente. Por lo tanto, Paulino Rivero miente a los canarios cuando dice esas falsedades.

Tenemos que librarnos cuanto antes de la pareja rumana. Las calamidades que seguimos padeciendo así lo exigen. Los canarios pasan hambre porque no tienen trabajo; los jóvenes tienen que emigrar; la gente se muere en las colas sanitarias y los padres se ven obligados a alimentar a sus hijos con mendrugos de pan duro, pero la pareja rumana sigue impasible. Una actitud despótica políticamente hablando que afecta igualmente al partido en el que militan ambos, Coalición Canaria. Por lo tanto, los dirigentes de esta formación política también son culpables. Es una pena porque apreciamos el nacionalismo, aunque la mayoría de los militantes de CC nos han salido ranas. Apreciamos el nacionalismo pero no a estos nacionalistas, salvo las excepciones que siempre hacemos.

Lo reiteramos: Canarias va de mal en peor. Ayer mismo publicábamos otra noticia en primera página que es un claro ejemplo de la inoperancia de Paulino Rivero y su equipo: "El Gobierno mantiene un ente fantasma con seis trabajadores". Los empleados de la Fundación para la Promoción de la Educación, eliminada por el Gobierno, acuden a sus oficinas sin tener nada que hacer. Qué desastre. Qué descontrol. Qué despilfarro habiendo tanta gente pasando hambre. Además de la noticia, antetitulamos con nuestra opinión: "¡Increíble!". Sabemos que no forma parte de la ortodoxia periodística opinar en los titulares, pero la inmoralidad política que consiente Paulino Rivero hace que nos hierva la sangre. Actos como estos deberían dar paso a una responsabilidad penal. No olvidemos que en Islandia han metido en la cárcel a los banqueros y a los políticos por inmorales en su actividad como tales.

Como decimos, no son ortodoxos los antetítulos que opinan sobre la noticia. Los ponemos para, además de dar salida a nuestro enfado, para que el pueblo conozca lo que pensamos de la gentuza política que nos ha caído encima. Queremos que los canarios reparen en el despotismo, la desvergüenza y el atrevimiento político con que están gobernando Paulino Rivero y su caterva de calamidades. Son atrevidos incluso con su integridad física, pues si siguen así el pueblo se echará a la calle como lo hizo ante el despotismo de la corte de Versalles, y ocurrirá lo mismo que sucedió entonces. Es algo que no deseamos, pues repudiamos toda violencia, pero la tensión social crece día a día por la mala gestión de "la pareja" y sus compinches políticos.

¿Qué le debe Canarias a Paulino Rivero y a la goda de su esposa?, nos preguntamos un día más. ¿Por qué gobiernan ambos al alimón favoreciendo a amigos y allegados y denunciando a las personas decentes y a las empresas que se esfuerzan, pese a las dificultades por las que atraviesan, en mantener los puestos de trabajo? Ese ha sido el caso de EL DÍA y de su emisora, Radio EL DÍA, objeto de la venganza de esta pareja vengativa y políticamente ignorante, pues no sabe que ni siquiera si Marruecos le permite a España que explote el petróleo que está en sus aguas, los beneficios serían para los canarios. Como decíamos el otro día, ese recurso serviría para llenar las arcas españolas en detrimento nuestro. Y todo por culpa de Paulino Rivero, que ha traicionado a su pueblo al no pedir la independencia en las innumerables ocasiones en que ha podido hacerlo.