Últimamente no hablamos de la Justicia porque hemos advertido un claro cambio en el tratamiento que estábamos recibiendo. Siempre hemos creído en la justicia de la Justicia; una institución formada en su inmensa mayoría por jueces y juezas justos, entre los que desgraciadamente se han colado algunos individuos o individuas que dictan sentencias sin la imparcialidad debida. ¿Tendremos que volver a hablar de la Justicia en el futuro? Esperamos y deseamos que no.

Decimos esto porque nos causan honda inquietud los rumores de que una periodista de Las Palmas, denunciada en su momento por el editor de EL DÍA debido a las gravísimas injurias que publicó contra su persona en el periódico canarión que dirigía, y archivada la causa (llegaremos al Supremo y más allá) por una jueza amiga suya (nos dicen que algo más que amiga; incluso algo más que amiga íntima), va a ser promovida por Paulino Rivero, inepto y despótico político, a un importante cargo de confianza para que cobre un sueldo pues esa periodista, a la que no mencionamos, se ha quedado en la calle al ser despedida debido a su actitud irascible con sus compañeros y con la empresa editora del periódico en el que estaba. Sea cual sea el puesto que le otorgue el "paulinato" -el régimen abusador y políticamente mafioso que se ha instaurado en estas Islas, disfrazado de falso nacionalismo-, lo pagaremos todos los canarios.

¿Hasta cuándo vamos a seguir con estas cacicadas y con estos desmanes de la pareja de El Sauzal? Un matrimonio al que no quieren ni en el pueblo en el que residen. Un matrimonio rumano o argentino; los "Kirchner de El Sauzal", como se refería ayer a este torpe político y a esta goda política nuestro columnista Andrés Chaves. Para que no falte nada, en el enjuague de buscarle ocupación a la periodista despedida -famosa en la tercera isla por sus maniobras para manipular a la Justicia, como lo hizo cuando consiguió que cinco magistrados de Las Palmas calificaran a José Rodríguez como delincuente, públicamente, con publicidad y sin vestir la toga- también anda metido el pájaro tatarita de siempre, pareja a su vez de la jueza condescendiente con su amiga del alma y algo más. ¡Qué triángulo! Pese a ser uno de los vértices de esta puntiaguda figura geométrica, la jueza no solo no se inhibió, como estaba obligada a hacerlo, sino que, además, condenó en costas al editor de EL DÍA para escarmentarlo. ¿Lo hizo para que no siguiera defendiendo la limpieza de la Justicia y la libertad del pueblo canario?

Por si fuera poco, existía otro motivo jurídicamente de mucho peso para que esa jueza no interviniese en la demanda contra la periodista, ya que está denunciada por José Rodríguez al haberlo calificado de xenófobo y racista, es decir, de delincuente, junto con los otros magistrados. Aunque no somos juristas, nuestra idea de lo que debe ser una Justicia justa (la que tendremos cuando seamos una nación soberana) nos lleva a intuir que esta persona no puede seguir vistiendo la toga de magistrada.

¿Qué podemos decir al respecto de Paulino Rivero, salvo que con planes como el de darle un sueldo público a esa retorcida periodista -auténtica hez de la profesión- está enmerdando cada vez más la política que hace su partido? Rivero, político necio, bruto y sin capacidad para resolver los gravísimos problemas de este Archipiélago, está hundiendo a Canarias en la miseria y desacreditando a su partido. Los hechos que se suceden día a día nos confirman que no estamos equivocados. Existe una maniobra contra EL DÍA porque Paulino Rivero y su caterva de mariachis no quieren que Canarias sea una nación con su Estado, porque ellos no tendrían cabida en un país independiente y próspero; ellos solo pueden cometer las tropelías que perpetran contra el pueblo mientras Canarias sea una vil colonia, en la que actúan como cipayos de la metrópoli. Para consumar su ruin campaña contra un periódico independiente e independentista, el más leído de Canarias, no reparan en medios. Recurren incluso a la iniquidad de pagarles sueldos de reptiles -con cargo al sudor de unos ciudadanos cada día más esquilmados- a individuos e individuas que antes los criticaban sin mesura ni piedad. Hasta le han dado una emisora al marica de Las Palmas, recomendada por otro político igual de inútil que Rivero y que, como él, gobierna pese a haber perdido las elecciones.

CC tiene que reaccionar y quitarse a este hombre de encima porque ha convertido a este partido en un antro de paulinos, de menas, de inútiles, de amigotes, de lo más sucio de la hez del periodismo y hasta de tataritas y lesbianas. ¿Hasta cuándo aguantará la paciencia de los canarios, y de los miles de magistrados rectos y justos cuya labor ponen en entredicho unas pocas ovejas negras, tanto desbarajuste, despotismo, nepotismo y corrupción?