EL PERIODISTA Humberto Gonar, que es primo hermano mío y ha sido muchos años compañero en la Redacción de este periódico, se ha quedado corto en la necrológica que, en el número del pasado lunes, dedicó al común amigo César Fernández Trujillo, fallecido en Santa Cruz el día anterior. César no solo era "caballero de las ondas", como dice Humberto en el título de la triste noticia, era realmente un todoterreno de la radio. Si me apuran, desde el montaje y la manipulación técnica de la emisora, tarea en la que ayudaba al muy querido y recordado jefe técnico de Radio Juventud de Canarias Wiberto Ramos, hasta concebir, crear y mantener cualquier programa de la clase más diversa.

César llevaba la radio en la sangre. No aprendió de nadie, porque las emisoras que en aquel tiempo funcionaban unas dependían del Gobierno, entonces dictatorial del general Franco, y emitían desde Madrid, y otras eran propiedad de sociedades, como fue Radio Club Tenerife, que emitía desde Santa Cruz, con sus estudios en la calle Álvarez de Lugo, esquina a la Rambla de Pulido, y Radio Las Palmas, que emitía desde la capital grancanaria, y esas estaciones eran de difícil acceso para quienes no fueran aficionados y poseyeran cierta preparación producto de la misma afición. Radio Juventud, que fundó entonces en toda España la Delegación Nacional del Frente de Juventudes, irrumpió en las ondas en los años cincuenta como estación-escuela y estuvo más abierta a la gente joven.

Sostenida en toda España por la Delegación Nacional de Juventudes, su primer director en Canarias fue el delegado provincial en Tenerife de esta organización juvenil de Falange Española, Luis López Espinosa, y su jefe de programas y verdadero fundador de la emisora, Mauricio Gómez Leal, fallecido el año pasado en Caracas, después de dirigir en Venezuela varias emisoras de radio y de televisión. Pasados los años, Radio Juventud fue incorporada y pasó a depender del ente público Radiotelevisión Española y se llamó Radiocadena Española, hasta que las emisoras de este origen pasaron a integrarse en las propias de Radio Nacional de España, con lo que desaparecieron ya como estaciones-escuela.

Este periodista pasó a integrarse como jefe de programas de Radio Juventud de Canarias cuando Mauricio Gómez Leal causó baja para marchar a Venezuela, y permaneció en la plantilla de la emisora hasta que esta se integró en Radio Nacional. Fueron treinta y seis años, en los que pasé por la jefatura de Programas y por el mismo cargo en Informativos, durante la dirección de la ya Radiocadena por José Agustín Gómez.

En todos esos años conviví y trabajé con César Fernández Trujillo, que, en lo que atañe a programación, se hizo insustituible, porque abarcó todas las facetas y fue un verdadero artífice en ese cargo, en el que creo que nadie por aquí ha podido superarlo. César creó y dirigió un programa cara al público que se realizaba en el espacio de la Ciudad Juvenil, situado en el lugar de Santa Cruz donde hoy se sitúa el Parque Boulevard. En ese programa, cuyo título no me viene a la memoria, porque son muchos los que dirigía César, intervenían conjuntos corales, grupos artísticos y variedades de este carácter que César organizaba en solitario o con un grupo seleccionado de colaboradores. Ese programa, que se llevaba a cabo los sábados por la noche, se hizo muy popular por la variedad e interés que le daba César.

Pero el compañero no se conformaba con esa realización, que era difícil de llevar a cabo. Abarcaba otros muchos con motivo de festividades de pueblos. César fue quien realizaba cada Navidad la "Hartanga Gigante" de San Juan de Dios, que organizaba y realizaba él mismo para los niños del centro hospitalario de los hermanos, la mayoría enfermos de la terrible poliomielitis, conocida por parálisis infantil. César gestionó y consiguió del Ayuntamiento de Santa Cruz que la gran cabalgata de los Reyes Magos, que recorría las principales calles de la capital tinerfeña, llegara hasta la entonces clínica infantil de San Juan de Dios, actualmente, y desde hace años hospital San Juan de Dios, para atender a afectados por cualquier enfermedad.

César dicen que falleció de una enfermedad pulmonar a consecuencia del tabaco, y yo no recuerdo nunca ver fumando al amigo y compañero, el cual no llegó a pasar, como sus compañeros, a la emisora Radio Nacional de España. Pero César, con más de medio siglo de tareas radiofónicas, no podía pensar en su retirada de las ondas y pasó a ser locutor deportivo en Radio Popular de Tenerife, ya propiedad de la cadena COPE, de la que se prejubiló, pero echó de menos los micrófonos y pasó a Radio Isla, propiedad y dirigida por su compañero de Radio Juventud y Radiocadena Española José Antonio Pardellas, también compañero en Radio Juventud de este periodista.

Descanse en paz el muy querido compañero y amigo, a quien se echará mucho de menos cuando no se escuche su voz en la radio tinerfeña, a la que tanto quiso y a la que dedicó su vida entera César Fernández Trujillo.