¿QUÉ ESTÁ pasando realmente en el Magreb? ¿Cuál es el verdadero problema de esta región de África? ¿Son acaso efectos colaterales del terrorismo y de la inseguridad en el Sahel y en el norte del África subsahariana, u obedecen a intereses concretos de Argelia? Indudablemente, la cuestión del Sahara no solo gravita sobre el futuro y la seguridad de la zona, sino que el contencioso histórico entre Argelia y Marruecos, que se remonta a la célebre "Guerra de las Arenas" de 1963, añade un plus de intransigencia por parte argelina, empeñada en arrinconar a Marruecos y seguir jugando con sus cartas marcadas y ayudándose de sus petrodólares.

Desde el año 1975 hasta la fecha, Argelia lleva gastados nada menos que 600.000 millones de dólares con su asunto estratégico del Sahara; un alto precio para una eventual salida al Atlántico para los hidrocarburos argelinos. Téngase presente, por otra parte, que la frontera terrestre entre ambos Estados está cerrada desde hace años, con lo cual Argelia sigue hostigando a Marruecos al negarse sistemáticamente a la apertura de dicho paso fronterizo, lo que va en detrimento de los intereses comerciales y de toda índole de Marruecos, cuya activa diplomacia trata de minimizar los efectos nocivos del cerco y el aislamiento al que se ve sometido el Reino de Marruecos por parte de Argelia, sobre todo desde que Abdelaziz Buteflika accedió al poder.

Como no se escapa a cualquier analista, la importancia de la imagen del conflicto del Sáhara Occidental es algo prioritario para Argelia, que es quien maneja los hilos de esa marioneta llamada Frente Polisario, y que trata de trasladar a la opinión pública internacional una imagen de paz y tranquilidad en los campamentos de Tinduf que en absoluto se corresponde con la inseguridad existente en la zona. En ese clima de crispación, y para contrarrestar esa imagen cada vez más generalizada de descontrol del territorio, se inscribe el polémico viaje de la tal Kerry Kennedy por El Aaiún y Tinduf, seriamente criticado por organizaciones promarroquíes, a las cuales ignoró olímpicamente.

Según el periódico digital Argelia Times, la estancia de la presidenta del Centro pro-Polisario RFK Center, Kerry Kennedy, le ha costado a Argelia la friolera de 140 millones de dólares por tan solo las veinticuatro horas que duró la visita a los campamentos de refugiados saharáuis de Tinduf. Tal como informa el citado diario digital, las negociaciones de Kennedy con el régimen argelino estuvieron condicionadas por una serie de puntos que formarían parte en la elaboración de un informe antimarroquí. Kerry Kennedy estuvo acompañada durante su visita por una comisión compuesta por predicadores evangélicos que pertenecen a una iglesia norteamericana llamada "Roca de la Iglesia de Jesús", que fueron presentados a los medios de comunicación como activistas de los derechos humanos y cuyo libre acceso a los campamentos fue una condición "sine qua non" de Kennedy. Los citados evangelistas fueron recibidos por el presidente de la fantasmagórica RASD, Mohamed Abdelaziz, y aceptaron hacerse cargo de unos quinientos niños de los campamentos en futuros programas de vacaciones en Estados Unidos, programados y supervisados por la iglesia en cuestión. A Kennedy y sus acompañantes se les preguntó si, para ser supervisores de la integración de un programa de enseñanza del idioma inglés en los campos, se iba a utilizar material educativo desarrollado por la citada iglesia americana, cuyos métodos son conocidos por su proselitismo activo a favor de la doctrina evangelista.

En este contexto, es importante resaltar la visita al Sahara Occidental de la ONG estadounidense Teach the Children International, cuyo presidente, Nancy Huff, declaró que el mantenimiento de los campos de refugiados de Tinduf es una pérdida de tiempo, y es hora de permitir a los saharáuis regresar a su tierra natal y unirse a los suyos. Los activistas de los derechos humanos Nancy Huff y Kathryn Porter Cameron han señalado asimismo que el retorno de los saharáuis de Tinduf a la madre patria, Marruecos, es una imperiosa necesidad que pondría fin a su sufrimiento. Durante una reunión con líderes tribales y jeques activistas saharáuis celebrada en El Aaiún los pasados días 12 al 14, con motivo de la visita de la citada ONG para preguntar acerca de los logros económicos y sociales y por la situación de los derechos humanos en la provincia meridional del Reino de Marruecos, se destacó la importancia de la autonomía como experiencia exitosa en varios países, señalándose que esta iniciativa permitirá a las familias saharáuis su reunificación y retomar las condiciones de vida y dignidad en su país, Marruecos.

Durante una reunión con el presidente y los miembros del consejo municipal de El Aaiún de Huff, que había hecho una larga misión humanitaria en los campamentos de Tinduf, dijo que encontró durante su visita a los campamentos muchos abusos graves de los derechos humanos, incluyendo el robo y el desvío de la ayuda humanitaria internacional a las poblaciones de los campamentos. Después de estas visitas, la delegación de Estados Unidos preparará un informe que presentará en el Congreso norteamericano, la Casa Blanca, el Departamento de Estado y a los miembros del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas.

Pero, como veníamos relatando, Argelia es la gran culpable de lo que pasa en el Magreb. Con la llegada al poder de Buteflika, como presidente de la república de Argelia, la política exterior de los Estados Unidos dio un giro de ciento ochenta grados (recuérdese que con la Guerra Fría Argelia estaba claramente alineada con la antigua URSS y el Pacto de Varsovia). De ahí que ahora la política de Buteflika con EEUU tenga dos claras vertientes: una, la política oficial, y otra, la política de ONG, donde la diplomacia norteamericana juega un papel determinante. Téngase en cuenta que la presencia de Norteamérica en África es notoria, y en este sentido es importante resaltar que, en 2013, una cuarta parte del petróleo y las materias primas que se consumirán en USA deberán provenir del continente africano, principalmente de Argelia.

En base a esta observación, un "think tank" israelo-estadounidense, UNIEN, y el Instituto de Altos Estudios Estratégicos y Políticos (IASP) abogaron por la creación de un comando militar de EEUU para África, AFRICOM, que la propaganda argelina había "situado" en Tan-Tan (Marruecos), pero que realmente está ubicado en Tamanrasset (Argelia). Precisamente, la periodista Amy Goodman habló en el programa de la televisión norteamericana "Democracy Now" del AFRICOM, que fue inaugurado por el Gobierno republicano de W. Bush al final de su mandato, bajo el mando del general afroamericano William E. Ward, un excoordinador de seguridad entre Israel y la Autoridad Palestina. El anuncio de este dispositivo dio lugar a una fuerte resistencia en África y ningún gobierno ha accedido a ser sede de la Comandancia General, que se basa en última instancia en las bases norteamericanas conjuntas en Italia y Alemania.

La dotación del AFRICOM se centra en la base de EEUU en Djibouti, donde ya hay tropas israelíes estacionadas. Especial atención requiere el golfo de Guinea. En un primer momento, y por razones diplomáticas, debía adoptar la forma de una red de pequeñas bases, en lugar de la construcción de grandes instalaciones. Washington también debería tomar iniciativas para proporcionar una política más conciliadora, incluyendo la aceptación de los campos petrolíferos chinos operativos en Sudán, dejando de desestabilizar el país. Al mismo tiempo, Francia debe reducir su presencia militar, compartir con los demás Estados de la Unión Europea y ayudar en las operaciones de paz en marcha auspiciadas por la Unión Africana (UA). París tiene todavía nueve mil militares destinados en Côte d''Ivoire, Senegal, Gabón, República Centro Africana, Chad y Djibouti. En 2011, la OTAN invadió Libia, "Bab el África" (Gateway to Africa), sobre todo, con la intención de adelantar la base del AFRICOM, lo cual explicaría el reciente asesinato del embajador estadounidense en Libia Chris Stevens y de las protestas generalizadas en Egipto, Yemen, etcétera.

¿Tiene alguien alguna duda de que la presencia del nuevo imperio yanqui en el continente africano obedece pura y exclusivamente a la existencia de cuantiosas reservas de hidrocarburos? Ver artículo anterior, "La trama del Centro Kennedy", EL DÍA, 8 de septiembre de 2012.

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