MIENTRAS Argelia, que el pasado 5 de julio celebró el 50 aniversario de su independencia, está en horas bajas, la hora de Marruecos, un país milenario (ver "Marruecos: un pasado esplendoroso", 21 de julio de 2012), ha llegado como era previsible, bajo la égida de SM Mohamed VI, que ha sabido situar al Reino de Marruecos en el lugar que le corresponde en el mundo, como país de referencia en el contexto del Magreb y de toda África, donde es la cuarta potencia de nuestro continente detrás de Sudáfrica, Nigeria y Argelia, precisamente, solo por sus yacimientos petrolíferos. Mohamed VI ha sido, pues, siguiendo la clarividencia de su padre Hassan II, el verdadero artífice del desarrollo y bienestar de Marruecos; cuya existencia misma como país se sustenta en el trípode formado por la geografía, la historia y la monarquía absolutamente consolidada, por otra parte, en el parlamentarismo marroquí y en un marco democrático y plural.

Y ello pese a la estrategia de Argelia -el enemigo irreconciliable- de permanente confrontación, que se empeña en mantener al precio que sea el artificial conflicto del Sahara Occidental, que es absolutamente distorsionador y dificulta el desarrollo integral de toda la región del Magreb (la UMA -Unión Magrebí Árabe- sigue estancada, con todo lo que ello implica). ¿Cómo se puede justificar el cierre de la frontera argelino-marroquí, producto de la intransigencia de Argelia, que impide el normal tráfico de vehículos y el flujo de personas y mercancías? Actualmente hay en el mundo solo tres fronteras cerradas: la citada entre Argelia y Marruecos, y las de Corea del Norte y Corea del Sur, con graves consecuencias políticas, económicas y sociales.

Esta situación hace, desde el punto de vista de las relaciones internacionales, que Argelia no cuente para nada en el concierto mundial salvo para la OPEP (Organización de Países Exportadores de Petróleo) por sus yacimientos de hidrocarburos (petróleo y gas); y que continúe presa de su secular aislacionismo, al que la han llevado los sucesivos gobiernos y la golpista cúpula militar argelina, desde la época del famoso Ben Bella.

Mientras, el papel de Marruecos se ha ido revalorizando a nivel mundial, y ya se plantea en las cancillerías occidentales la siguiente cuestión: ¿Marruecos, un puente entre la Unión Europea y el Golfo Pérsico? En este sentido, el viaje del monarca marroquí a diversos países del Golfo ha creado enormes expectativas por su relevancia y trascendencia y, sobre todo, por sus repercusiones económicas en el entorno más inmediato (¡Canarias incluida!). Véase:

El reciente Premio Nobel de la Paz a la Unión Europea es considerado por muchos observadores como una señal de aliento y estímulo a la crisis de identidad que enfrenta esa organización en los últimos tiempos. Frente a este fenómeno, es interesante estudiar las distintas agrupaciones regionales en el mundo, incluido el Consejo de Cooperación del Golfo (CCG), fundado en 1981 y que fue inicialmente una organización cuyo objetivo es hacer frente al progresivo ascenso del islamismo chiíta de Irán, el enemigo común del CCG, la UE y EE.UU.

En un informe publicado en el Parlamento Europeo el 10 de marzo de 2011, se dice "hasta la fecha, el CCG sigue siendo la única organización regional estable basada en el multilateralismo y la cooperación". El informe destaca asimismo "el papel fundamental de los Estados del CCG en el escenario mundial que coincide con los intereses de la UE en materia de estabilidad internacional y de gobernanza económica mundial" y, señalando el poder financiero del CCG, el informe agrega que "los Estados del CCG también tienen una significativa influencia financiera, al alcanzar sus fondos de riqueza soberana, en 2009, más de 1.380 millones de dólares, o más del 35% del volumen mundial. Habiéndose convertido en el motor económico en todo el Oriente Medio y Norte de África, las reservas de los Estados del Golfo son más del 40% de la riqueza mundial producida en esta área y el 50% de las reservas de divisas es de 1,07 billones de dólares". Por su parte, la directora del FMI, Christine Lagarde, calificó recientemente de "sólida y estable" la situación económica de las monarquías del CCG. En cuanto a la ayuda humanitaria, el CCG contribuyó con 120.000 millones de dólares desde la década de 1970 como "Iniciativa Pública Árabe de Gestión de la Investigación".

Después de que la adhesión de Marruecos quedara en "stanby", a propuesta del CCG en 2011, sus miembros decidieron abrir nuevos canales para construir y establecer una exitosa asociación económica con Rabat. De ahí, que el Rey Mohamed VI de Marruecos haya iniciado el pasado día 16 de octubre una visita oficial de trabajo en Arabia Saudita, Qatar, Emiratos Árabes Unidos y Kuwait, que movilizará importantes fondos e inversiones. Un viaje que ha despertado grandes expectativas en el país, por cuanto supone una esperanza para los actores económicos marroquíes. Según el diario The Economist en su editorial del 17 de octubre, "el viaje del soberano y de la importante delegación marroquí en el Golfo ahora mismo, debe ser visto como un marcador. En estos tiempos de crisis, el Reino ha tenido éxito y traerá 5.000 millones de dólares en cinco años".

A su llegada a Jordania en su periplo, el periódico jordano Al Rai dijo que la visita "toma su papel y la importancia del juego que distingue al Rey de Marruecos y su país en apoyo a las causas árabes e islámicas, especialmente la de Al Quds" que preside Mohamed VI. A este respecto, la prensa jordana destaca "la posición humanitaria de Marruecos hacia la crisis siria", dado que el Reino marroquí fue uno de los primeros países en conceder ayudas a los refugiados sirios, con la instalación de un hospital médico-quirúrgico de campaña de las Reales Fuerzas Armadas.

Es lógico, por tanto, que dado el carisma y el renombre internacional de Mohamed VI, Marruecos haya capitalizado las inversiones europeas en África, protagonizando el estatuto avanzado con la Unión Europea y, por último, muy recientemente, el diálogo estratégico con los Estados Unidos. Por otra parte, cabe destacar la creación de la Autoridad de Inversiones de Marruecos (AIM) que incluye los fondos de inversión sectoriales nacionales dedicados a la inversión en el fortalecimiento de los sectores productivos y para estimular alianzas con instituciones internacionales, incluidas la de los Estados del Golfo. Marruecos, hábilmente, ha demostrado su experiencia en asociaciones internacionales que le permiten desempeñar un papel de liderazgo como plataforma y cabeza de puente entre África, Europa y Estados Unidos.

Así pues, el viaje de Mohamed VI a los países del Golfo ha constituido un rotundo éxito económico y diplomático. Téngase en cuenta que, tanto Arabia Saudí, Qatar, Emiratos Árabes Unidos y Kuwait han financiado importantes proyectos en Marruecos dentro de la "asociación estratégica" establecida en 2011 entre el país magrebí y el Consejo de Cooperación del Golfo, al que pertenecen los citados países. Los proyectos financiados por estos cuatro países suman un montante de 1.000 millones de dólares por año, entre 2012 y 2016.

Los analistas consideran que Marruecos va a necesitar de manera creciente la ayuda de los países del Golfo -con los que mantiene en general buenas relaciones-, ya que sus principales socios comerciales, todos europeos, incluyendo la decadente España, se encuentran en crisis y arrastran a la baja a las principales fuentes de ingresos marroquíes: exportaciones, remesas de los inmigrantes e ingresos por turismo. De hecho, las previsiones de crecimiento de Marruecos para 2012 han sido ya corregidas a la baja en varias ocasiones en lo que va de año, y actualmente el organismo encargado de la planificación económica, Alto Comisariado del Plan, considera que el PIB no subirá más allá del 2,4%, mientras que el Gobierno aún aspira oficialmente a un 3,4%, cifra lejana al 5,5% proclamada en enero. En todo caso, es evidente que Marruecos es un país en vías de desarrollo, con grandes potencialidades, y con el que Canarias debe cooperar en todos los campos sí, o sí.

Así que ya lo saben, queridos compatriotas: "A quién a buen árbol se arrima, buena sombra le cobija".

rmorenocastilla@hotmail.com