La cosa parece que va muy en serio. a ciudad de Santa Cruz de Tenerife, representada por su alcalde José Manuel Bermúdez, o sea el propio Ayuntamiento, se propone llevar a los tribunales de justicia al Gobierno de Canarias, presidido por Paulino Rivero. En realidad, las Casas Consistoriales de la capital tinerfeña lo que hacen es seguir adelante con el contencioso administrativo, pero añade la prensa de la capital insular que la gente de Santa Cruz no le cree hasta que vea la denuncia en los propios juzgados.

El alcalde, en nombre del Ayuntamiento, denunciará al Ejecutivo del señor Rivero por incumplimiento del convenio de colaboración para el desarrollo de infraestructuras culturales, y especialmente incumplimiento de invertir en las obras de rehabilitación del teatro Pérez Minik dentro del complejo del Parque Cultural Viera y Clavijo, así como el entorno y anexos del inmueble.

Pero hay recelos por parte de quienes reciben las obras y anuncian que no creerán la decisión del Ayuntamiento hasta que la denuncia no llegue a los juzgados.

Y en estos momentos estamos a la espera de lo que determina el juez, aunque en buena ley debe ser Rivero, como presidente de Gobierno, el que se responsabilice del incumplimiento. En cuanto a la acción del alcalde, el pueblo entiende que habiendo una policía municipal en servicio del alcalde no se contó con ella para mantener un poco de orden en el Parque Viera y Clavijo ya que se comenta cómo los "okupas" pudieron penetrar a la iglesia como si se tratase de una vivienda, haciendo en su interior su vida cotidiana en lo que constituye uno de los templos más valiosos de la isla por su bello estilo gótico, algo inusual en este tipo de construcciones en Canarias.