Los datos de la encuesta con tufo a nacional-colonialismo español que lleva por título "Defensa nacional y fuerzas armadas" (¿no es esto supuesta apología del terrorismo?), del Instituto Español de Estudios Estratégicos, del Ministerio de Defensa, realizada en el año 2011 y dada a conocer dos años después, en octubre de 2013, para manipular bien los resultados (a esto lo denominan transparencia, como a las guerras de saqueo neocolonial misiones de paz), aunque se haya realizado con el dinero de todos nosotros, ha sido diseñada para evaluar la españolidad del personal y por lo tanto con un importante sesgo de nacionalismo español. Esto no es óbice ni cortapisa para reconocer que el sentimiento nacionalista de los canarios y canarias está por encima del de vascos y catalanes, como no podía ser de otra forma, dado que Canarias es una infame colonia española desde que se inició la invasión armada de nuestro territorio en el año 1402, nacionalismo del que, torticeramente, viven muchos falsos nacionalistas.

Pero con ser alarmantes estos datos para el colonialismo, especialmente para su ejército de ocupación, no para los que es un orgullo ser canario, que supone la buena noticia, lo que más les preocupa es el hecho de que un raquítico cuatro coma tres por ciento de la población se confiese sólo española y un cero por ciento, o sea nadie, más español que canario, sobre todo teniendo en cuenta que la población española en Canarias, según algunos cálculos, se aproxima al 25 por ciento, lo cual también es otro motivo de orgullo para todos nosotros, que consideramos hermanos a todos los pueblos que conforman el denominado Estado español.

Ya lo anticipaba el político conservador Cánovas del Castillo en el siglo XIX cuando afirmaba que "español es aquel que no puede ser otra cosa" , rechazo provocado por el Gobierno y el Estado colonialista español, régimen monárquico medieval responsable de los genocidios canario y americano, que todavía siguen celebrando cada 12 de octubre, con formato de macabra fiesta nacional española, para vergüenza y oprobio de la humanidad entera, celebración a la que el anterior dictador, Franco, llegó a denominar "Día de la Raza" ¡Más vergüenza y más oprobio todavía!

Ahora se entiende mejor el "militar esfuerzo" por hacerse presente en la sociedad canaria, procesiones incluídas, intentando resucitar, nunca mejor dicho, el nacional-catolicismo metropolitano, no siendo responsable el damnificado pueblo español de la negra historia colonial iniciada con el régimen monárquico medieval, muy al contrario, es también una víctima, no el verdugo, de la represión y el terror desencadenado por el citado régimen. Viene a colación aquí la famosa sentencia: "No puede ser libre el pueblo que oprime a otro pueblo".

El sentimiento anticolonial de los canarios y canarias viene magistralmente documentado en el referéndum celebrado y ganado el 12 de marzo de 1986, que de forma abrumadoramente mayoritaria rechazó la integración de Canarias en la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN), sirviendo también de respuesta a la pregunta que en la escuesta se hace referente a la emoción transmitida por la bandera franquista, el himno también franquista y los actos castrenses, organización de la que forma parte España y que si tuviese un mínimo de dignidad, respeto y decencia democrática ya se hubiera retirado a sus fronteras.

A consecuencia de esa estrepitosa derrota, el coloniaoismo impuso el sistema electoral más antidemocrático jamás visto, pues exije un 30% de los votos para obtener representación parlamentaria, patrocinando paralelamente la abstención de los independentistas (ningún organismo internacional considera la abstención), con el perverso objetivo de que no podamos ejecutar nuestra victoria más fácilmente desde las instituciones, exigiendo en Naciones Unidas la descolonización y proclamación de la independencia, camino que de una forma u otra, no les quepa la menor duda, recorreremos con el coraje que sea necesario.

Esto nos debe servir de reflexión, sobre todo para aquellos que se les llena la boca cuando afirman que Canarias figura en las Naciones Unidas como territorio autónomo, sin serlo, pues la característica principal de un territorio autónomo es que tiene capacidad de decisión. No es el caso de Canarias, como el citado referéndum ha dejado bien a las claras.

No recoge la encuesta el sentimiento de los canarios y canarias por nuestra bandera, la tricolor y con siete estrellas verdes, sentimiento que será un honor expresar públicamente, en nuestras calles, plazas, ventanas y balcones en los actos que celebraremos del 21 al 29 de octubre, con motivo del 49 aniversario, coreando las consignas "descolonización e independencia", "esta bandera es la verdadera", "que no, que no, que no soy español", entre muchas otras, actos en los que el Movimiento por la Unidad del Pueblo Canario (Movimiento UPC) llama a participar a todos los canarios y canarias, así como a todos aquellos demócratas internacionalistas que luchan por la descolonización e independencia, por los legítimos derechos nacionales de los pueblos que, como el nuestro, aún sufren la lacra del colonialismo. Esa será la mejor encuesta.