Respetamos a la Justicia. Siempre hemos creído en la grandeza de la Justicia. Sin embargo, hemos de hablar, un día más, de jueces, de juezas y de presunta prevaricación. Es decir, de dictar sentencias injustas con plena conciencia de que están obrando mal. epetimos que tanto EL DÍA como José odríguez, editor y director de este periódico, creen en la Justicia a pesar de los golpetazos que han recibido con sentencias condenatorias, todas ellas recurridas en instancias superiores. Confiamos en los magistrados y magistradas, pero ello no es óbice para que nos sintamos decepcionados por algunos fallos que consideramos injustos.

Sentencias, por ejemplo, como la de un señor al que llamamos el tiñoso, por la que fuimos condenados aunque jamás hicimos ninguna referencia directa a él, pues nunca lo citamos por su nombre. Tras recurrir la sentencia, la Audiencia Provincial de Santa Cruz de Tenerife redujo a una décima parte la indemnización establecida en la condena inicial. No obstante, dicho señor, que ejerce como uno de los cuatro godos de la prensa, sigue afirmando que lo compensamos con la cantidad establecida en la primera sentencia. Posteriormente hemos sido condenados, igualmente a nuestro entender de forma arbitraria, por criticar a una profesional de la comunicación por un comportamiento que consideramos inmoral e indigno. Consideró su señoría que tanto el editor de EL DÍA como dos columnistas de este periódico habían invadido su honor al ejercer una crítica profesional y los condenó a todos ellos a pagarle una indemnización, aunque cinco veces inferior a la que solicitaba la denunciante. Hemos ejercido nuestro derecho a recurrir esa sentencia.

Seguimos. En menos de veinticuatro horas, pese a la demora que suele ser habitual en cualquier trámite judicial, se dictó sentencia contra EL DÍA a raíz del juicio ocasionado por la denuncia de la esposa del presidente del Gobierno de Canarias; una señora que es concejal del Ayuntamiento capitalino. La celeridad de esta condena ha sorprendido a todo el mundo. ¿Ha influido en este asunto la prepotencia de la que hace gala esta señora, que se considera a sí misma una virreina de España en Canarias?

No acaban aquí las injusticias que se han cometido contra EL DÍA y su entorno. Una magistrada de Las Palmas se permitió acusar a José odríguez de racista y xenófobo -es decir, de delincuente- públicamente y con publicidad en la primera página de un periódico canarión. Esta jueza fue denunciada por José odríguez. Pese a ello, no se inhibió en la tramitación de una denuncia que interpuso el editor de EL DÍA contra una periodista de Las Palmas por graves insultos. Y no solo esto, pues posteriormente archivó la denuncia y condenó en costas a José odríguez para "escarmentarlo". Un motivo por el cual también ha sido denunciada esta magistrada.

En esta persecución ha habido excepciones, como es la sentencia de un juez que le prohibió a un maricón de Las Palmas -respetamos a los homosexuales contra los que nada tenemos, pero este individuo es un marimarica retorcido y ruin- seguir denigrando a José odríguez. Sin embargo, no pasó mucho tiempo antes de que tres magistradas de la Audiencia Provincial revocasen esta sentencia justísima -más que justísima, divina- y avalasen "el derecho" del maricón a reanudar sus insultos. Seguimos confiando en la Justicia y la respetamos, pero nos parece que ya está bien.

Paralelamente, hemos denunciado a muchos individuos pertenecientes a lo más hediondo de la hez del periodismo y del mundo académico por insultos contra el editor de EL DÍA. Hasta hoy todos se han ido de rositas porque, o bien han sido absueltos, o bien las denuncias han sido archivadas.

No sabemos si estas decisiones judiciales están motivadas por desacuerdos con nuestra línea editorial. Aspiramos a que Canarias sea una nación libre, pero mientras continuemos siendo una colonia española nos ampara, aunque no nos guste, la Constitución española. Una ley de leyes o carta magna que consagra la libertad de información y de opinión. ¿O es que ya no tenemos ese derecho? ¿Hay que pertenecer a la hez del periodismo para ejercer una crítica política o profesional sin acabar en el banquillo?

No comprendemos el porqué de estos ataques hacia quien representa la máxima dignidad del periodismo isleño, como lo es José odríguez. El hombre con el currículo más amplio e interesante del Archipiélago.