No se debe escribir todos los días sobre lo mismo; y no porque se aburra el escritor (yo no me aburro), pero el lector puede verse obligado a decir: "siempre perdiz, cansa". Así que espero finalizar hoy mis recuerdos de las Jornadas Culturales del Archipiélago que he citado un tanto atropelladamente. Y es que dispongo de poco espacio para contarles todo lo que quiero. Comenzaré con la música y finalizaré con la visita de personalidades ilustres, que llegaron atraídas por las Jornadas.

En la música hay mucho que destacar: Cuarteto Tarragó, de Barcelona, que había obtenido un premio internacional en 1975; Cuarteto de Madrigalistas, pianista Guillermo González, Masa Coral Venezolana del Hogar Canario en Caracas, Dúo Internacional Ramos-Ferrer (violonchelo y piano), Cuarteto Polifónico de Madrid, Polifónica Friulana, de Italia; Polifónica de las Palmas, Christoffer Coin (violonchelo), Danzas de Josefina Ripoll, Gladys Alemán y Gelu Barbu, directores como Joaquín Parisan, Wing Chie Yip, y Maestro Tarridas, creador este último del pasodoble "Garachico tinerfeño", hoy casi olvidado no sé por qué motivos... ¡Cuántos músicos, directores de ballet, compositores...! Muchos nombres se me escapan. Pero debo pasar a otro apartado para no cansar demasiado al lector.

Si hablamos de exposiciones habremos de citar a Joan Miró, Arranz Bravo, Antoni Tapies, Rafael Bartolozzi, José Guinovart, Eusebio Sempere, Pablo Serrano, José María Subirats, César Manrique, Pedro González, Eladio de la Cruz, Yamil Omar, Maribel Nazco, María Belén Morales, Martín Chirino, Luis Montull, Néstor de la Torre. Plácido Fleytas, Luis Alberto...

Vamos con los presidentes de gobierno y Jefes de Estado para citar a Rafael Caldera, Adolfo Suárez y Calvo Sotelo; habrá que traer aquí, entre los ministros, a Martín Villa, Otero Novas, Luis Ortiz, Sánchez Bella, Fernández de la Mora, Robles Piquer, José Luis Robles, Ricardo de la Cierva..., Seguimos con otros personajes: Vizcaíno Casas, Juan Rodríguez Doreste, José Arozena Paredes, Alfonso García Ramos, Luis Diego Cuzcoy, Alejandro Cioranescu, Socías Humbert (alcalde de Barcelona), José Luis Robles (alcalde de Bilbao), Tena Ibarra (Presidente el Instituto de Cultura Hispánica, de Madrid), Luis López Anglada (poeta), Enrique Azcoaga ( poeta, escritor y crítico de Arte, exiliado a Buenos Aires durante el franquismo); Alfredo Amestoy y Tico Medina (locutores de televisión), alcaldes de Dusseldorf, San Francisco de California y Caracas; Jean Dausset (premio Nobel de Medicina), Richard Pearson (embajador de Gran Bretaña), Carlos Capriles (embajador de Venezuela en Madrid)...

Cierro la lista, un tanto obligado por las circunstancias; pero me faltan muchos nombres, tanto españoles como extranjeros. Algunos actuaron en las Jornadas; otros asistieron como espectadores. También artistas y escritores canarios intervinieron en los actos de cada año, como Alfonso y Juan Manuel García Ramos, Pedro Macías, de TVE en Canarias; Alberto Vázquez Figueroa, Francisco Sánchez (director del Astrofísico de Canarias), Herrera Piqué (consejero del gobierno socialista de Canarias), David W. Fernández, canario residente en Venezuela y autor de varias obras sobre Garachico...

Aunque me falten más nombres y mi redacción sobre los actos parezcan más que atropelladas, las Jornadas marcaron un antes y un después de toda la Historia Cultural de Garachico, (¡de toda!), desde que el Lugar fue fundado por Cristóbal de Ponte en 1496 hasta nuestros días. (Se admiten disidencias).

Prometo ocuparme en próximas ediciones, siquiera superficialmente, de la labor desarrollada, en el aspecto cultural, bajo las alcaldías de Cándido Abad, Teodoro Velázquez, Pascual González Regalado, Juan Manuel de León y Ramón Miranda, donde también hubo mucho y bueno. Luego, ustedes dirán si he acertado o no en mis apreciaciones. Ya saben ustedes que cada hombre es un mundo. Y las equivocaciones de quienes escribimos están siempre a la vuelta de la esquina, esperando cualquier tropezón por eso de las prisas. Pero no hay que preocuparse. Repito que quiero cumplir mi promesa de citar otras vertientes culturales de distintos alcaldes garachiquenses contemporáneos. Se lo prometí a David Baute y lo prometido es deuda.