El Boletín Oficial de Canarias núm. 149, del pasado día 4, publicó una resolución aprobando las bases reguladoras y la convocatoria del Programa de Fomento del Empleo "Cheque Trabajo", por el cual el Gobierno autonómico se compromete a pagar una subvención a los empresarios por la contratación de una persona desempleada que lleve más de seis meses inscrita en las listas de desempleo de Canarias.

Con este sistema, novedoso en Canarias, no es el Servicio Canario de Empleo (SCE) quien ofrece un puesto de trabajo a un/a desempleado/a, sino que es la persona interesada quien debe buscar una empresa que le contrate a cambio de un "pagaré" que el Gobierno canario se compromete a hacer efectivo a tal fin. Quienes deseen acogerse a este sistema de empleo tienen de plazo hasta el 15 de septiembre para solicitar del SCE el reconocimiento como beneficiario del programa "cheque trabajo". Obtenida dicha aprobación y con el talón en ristre, buscarán una empresa que les quiera contratar para trabajar, con el compromiso del Gobierno autonómico de que esa entidad recibirá de forma directa una subvención de 2.500 euros si el contrato es temporal, con una extensión mínima de seis meses, o de 4.500 euros si el contrato es indefinido, al menos por dos años.

El Gobierno canario pone algunas condiciones a las empresas para que este procedimiento de contratación sea viable. Entre otras, que la contratación suponga un incremento real de la plantilla respecto a su situación en el trimestre anterior; que no haya realizado despidos improcedentes en el último año; no poder contratar a parientes del empresario; tampoco podrán beneficiarse aquellas empresas que hayan cometido infracciones graves o muy graves en materia de prevención de riesgos laborales; las empresas deberán estar al corriente de sus obligaciones tributarias con las Haciendas autonómica y estatal, así como con la Seguridad Social, etc.

Ante la elevada demanda de personas solicitantes del "cheque trabajo", el Gobierno ha tenido que incrementar el presupuesto inicial previsto, de 500.000 euros, a dos millones. Sin embargo, esta cantidad parece insuficiente teniendo en cuenta que en Canarias hay 357.000 desempleados. Para que sirva de referencia, la Comunidad Autónoma de Madrid dedica 26 millones de euros en subvenciones a las empresas a este fin y ha creado ya más de 3.300 nuevos empleos.

Veamos. Cualquier política de empleo ha de estar dirigida, prioritariamente, a aquellas personas desempleadas de larga duración, hayan recibido o no alguna subvención anterior, porque hay mucha gente que no sabe lo que es un empleo ya que no se le ha dado jamás una oportunidad de conseguirlo y adquirir experiencia laboral. ¿Acaso las empresas no eligen trabajadores con experiencia? ¿Cómo diablos van a adquirir práctica si nadie les ha dado una oportunidad para lograrla? Es que ni siquiera en los convenios que acuerda el SCE con los ayuntamientos y otros organismos orientados, precisamente, para que las personas desempleadas puedan adquirir experiencia son seleccionadas por carecer de ella. ¡Increíble!

Yo me pregunto también si esos cheques que las empresas reciben por contratar a un/a desempleado/a gozan de respaldo financiero, si están incluidos en alguna partida presupuestaria aprobada, porque si no se dispone de una dotación económica, ¿cómo se van a cobrar?

Por otra parte, a las empresas se les exigen unos requisitos que el demandante de trabajo, obviamente, desconoce. ¿Qué ocurrirá si un empresario acepta el cheque que se le ofrece y después resulta que él no cumple las condiciones que debe reunir para poder contratar? ¿Cómo recuperará el aspirante a contrato el cheque para entregarlo a otra empresa si el plazo de validez del mismo caduca? ¿Perderá su opción? En fin, veremos el resultado práctico de este sistema tan criticado por las centrales sindicales de cara a la contratación de desempleados.