1.- Dicen que traen vino de La Mancha para mezclarlo y embotellarlo como canario. Lo dice una denuncia anónima que resulta que puede ser verdad. Y digo yo, ¿no saldremos ganando con la mezcla? Porque el tinto canario, con alguna excepción, a mí me parece una mierda, no así algunos blancos, de gran consideración. No me vale que este vino lo consumieran los zares en los tiempos de don porque los zares le entraban a todo y así les fue. Entre el vino de La Mancha, el beaujolais francés y el nuestro, yo me quedo con el segundo, que además tiene un rito de presentación fantástico, allá en la Borgoña y en todas partes. Por la carretera te encuentras en las ventas un cartel que dice: "El Beaujolais ha llegado". Y la gente se para a comprarlo por cajas, que mete en el coche y se las lleva para casa, a enfriar el caldo y pa dentro. Esto del vino tiene un trajín muy curioso y ahora todo el mundo entiende y se pone a chaquear la lengua antes de mandarse la copa, al primer sorbo, como cogiéndole el sabor y sin tener puta idea de nada.
2.- Hasta el mago hace ya el chasquido, haciéndose el fino, algo que no le pega nada. El mago tiene el gaznate cuarteado y no siente sino el chorro que entra, pero no le coge el sabor porque ha estropeado el conducto con la caña mañanera, el azufre y el rastro del "Kruger" fuerte, que desvirtúa cualquier degustación. Así que a mí no me hablen de vino de La Mancha, que seguramente es mucho mejor que el nuestro, aunque no seré yo quien justifique un fraude, mucho cuidado con eso. Si lo hubiera, que todavía no se sabe y en esto está investigando quien corresponda. Quien corresponda es siempre la autoridad competente.
3.- Así que a nuestro vino embotellado le echan pirriaco de fuera. Me gustaría saborear la mezcla, porque a lo mejor han inventado una nueva variedad de morapio, el Manchucan un suponer, que hará las delicias del mago en esos guachinches de los altos. Por eso digo que en esto del vino no hay cuartel y cada uno tiene su teoría, aunque sea tan descabellada como la mezcla caradura de dos caldos de procedencia tan distante. A ver qué resulta de la investigación y a ver cuál es el resultado porque igual están poniendo una pica en Flandes. Si le preguntan al mago, acostumbrado a la mescolanza, puede que hasta aplauda la idea, tras el chasquido.
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