El cronista está obligado hoy a cubrir una información con varios frentes y muchos protagonistas. Una noticia que ha producido sorpresa; pero, especialmente, tristeza; y trataremos de explicárselo.

Pero antes debo dar cuenta del recibo de tres escritos dirigidos a este cronista. No es nuestra costumbre hacerse eco, públicamente, de quienes escriben sobre los temas que tratamos cada domingo; pero en la crónica ucrónica de hoy haremos una excepción.

Resulta que en la información de la semana pasada, al hablar de las escuchas telefónicas y citar personajes y situaciones que se estaban relatando en el congreso que presidió Richard Nixon, nos olvidamos de reseñar la presencia de Txiki Benegas, Alfonso Guerra, Felipe González y miembros del equipo directivo de la cadena Ser, por aquella escucha telefónica que se difundió por la cadena de radio, en la que Txiki Benegas a una pregunta de Guerra se refirió al expresidente como "dios" y que causó un tremendo revuelo en la radio con gran eco en todos los medios informativos, políticos y sociales.

-Y no te olvides -me recuerda Iñaki Gabilondo-, que a Narcís Serra le llamaba "el catalán" y a Carlos Solchaga "el enano".

-Joé, muy grassiosso er chavá que era ¿verdá, picha?, apostilló Guerra, dirigiéndose a Felipe.

- Sí, por consiguiente. Añada usted, señor periodista.

Pues ha quedado dicho y subsanada la falta de reseña el domingo pasado, señores Benegas, Guerra y González. Y gracias por esa foto dedicada en donde se les ve, durante una estancia en Tenerife, comiendo en La Caseta de Madera, bien atendidos por Paco Poleo, y en compañía de Jerónimo Saavedra, Alberto de Armas y María Dolores Pelayo, entre otros.

La segunda reclamación proviene de la presidenta de la Asociación Mundial de Palomas Mensajeras. Porque, efectivamente, al enumerar los variados medios de conversación a distancia, algunos no por antiguos menos eficaces, que se están adoptando desde hace unas semanas para evitar las escuchas telefónicas, como el tam-tam, las columnas de humo, el motorista, las banderitas, el sistema morse, etc. nos olvidamos de citar a una de las comunicaciones más antiguas. Me relata la presidenta palomera que ya desde la antigüedad han hecho grandes servicios, tanto en la guerra como en la paz, y, en muchas ocasiones, como en la Gran Guerra, de la que se han cumplido cien años de su comienzo (1914-1918), en las que fueron muchas las mensajeras asesinadas en pleno vuelo al verlas los soldados en el aire con un "papelico" (así lo ha escrito) en el pico. "Incluso -cerraba su misiva la presidenta- cuando llevaban un signo de paz para los combatientes, como una ramita de olivo y cruzaban trincheras y países y eran abatidas sin piedad. Es por lo que reclamo, señor cronista, un lugar en sus escritos, ya que se olvidó de citarnos en la información, ya citada. Gracias. Y le envío una ramita de uno de los olivos del monte de Getsemaní que yo misma he recogido en el mismo lugar en donde oró Jesús. Que no olviden que el Creador nos ha elegido como símbolo iconográfico del Espíritu Santo. Que la paz sea con usted y esa bendita tierra de Tenerife en donde hay tanta afición a la colombofilia".

Y firma con una reproducción de la paloma de Picasso.

Amigos, el cronista quedó impactado al leerla y ha lamentado el olvido, aunque por el contenido de la carta... pues hasta mereció la pena recibir un reproche tan singular.

La última nota es de un listillo que me pregunta qué me fumo antes de escribir crónicas ucrónicas cada domingo. En la RAE se explica muy bien lo que es una ucronía: "Es un género literario de memoria histórica alternativa. Reconstrucción lógica dando por supuestos acontecimientos no sucedidos pero que habrían podido suceder". ¿Satisfecho?

Y, por cierto, le recomiendo la última edición, recientemente publicada, del Diccionario de la Lengua Española. Aunque hay incorporadas palabras nuevas que yo no pienso utilizar. Otro día.

La noticia a cubrir hoy se desarrolla en Prado del Rey y en Torrespaña, sedes de RTVE. Se intenta cerrar las emisiones de REE, Radio Exterior de España. Ha sido tal la reacción de cofradías de pescadores, dirigentes de la Marina de Guerra y de la Mercante, armadores de buques, emigrantes españoles y descendientes residentes, especialmente en Venezuela, Cuba, Argentina, Centroeuropa, etc, y que parece ser que los mandamases del la radio del Estado se lo están pensando.

Representantes de la cultura española y defensores de nuestro idioma, el segundo más hablado del mundo, se reúnen en estas sedes, a las que el cronista no ha tenido acceso porque las deliberaciones son secretas. Cervantes, Pérez Galdós, Cela, Guimerá, Juan Ramón Jiménez, Blasco Ibáñez, Pio Baroja, Reverte, Rubén Darío, Umbral, Raúl del Pozo, Fernando Delgado, Rosalía de Castro, García Marquez, Vargas Llosa, J.M.García Ramos..., cientos de literatos y expertos.

Al parecer, la idea era apagar los emisores porque el costo es muy grande (no se ha planteado lo mismo la BBC de Londres).

Bill Gates acaba de hacer una proposición: regalar un ordenador a cada oyente para que sigan las emisiones por Internet. La propuesta se está estudiando y de ello hablaremos dentro de siete días.

Antes de cerrar esta información, este cronista quiere dejar constancia de nuestro apoyo (somos muchos) a Radio Exterior, porque desde Canarias se han emitido programas para todo el mundo como "Españoles en la Mar", por J.A. Pardellas y Fabri Díaz, " Coplas de las Islas", por Almadi o "Música de las dos orillas", por Elfidio Alonso y Fernando Díaz Cutillas. Que conste.

"Aquí el Centro Emisor del Atlántico de Radio de Radio Nacional de España. Desde las Islas Canarias un saludo y hasta la próxima semana".