En mi discurso de investidura empecé hablando de mis hijos y sus amigos. Hablé de los niños y niñas de Tenerife que van a vivir el mundo que seamos capaces de dejarles dentro de muy poco, porque los años, como ya saben, pasan volando. Y hablé también de las palabras de una mujer a la que escuché decir que no tenemos que construir un mundo mejor para nuestros hijos, que serán los ciudadanos del mañana, sino que debemos educar a mejores ciudadanos del mañana para que entre todos hagan un mundo mejor.
Empecé así porque estos próximos cuatro años siguen siendo de las personas. Hacer política en el gobierno de Tenerife consiste hoy en mantener la vista fija en los ojos de la gente que nos mira y nos pide ayuda. Nuestra sociedad sigue teniendo profundas heridas abiertas, familias en dificultades y personas que necesitan el auxilio de las instituciones públicas que se han convertido en los pilares donde se sostiene a duras penas un estado de justicia social. Trabajaremos para ellos, sin perderles de vista como prioridad. Pero también tendremos que poner las piezas del futuro.
Durante este mandato vamos a mantener abiertas las puertas y ventanas del Cabildo. Para que este sea un gobierno transparente. Pero también para que entre el viento fresco de las ideas de la gente. Seguiremos buscando visiones y visionarios, gente con talento e imaginación capaces de soñar con nuevos proyectos que un día pueden ser realidad y colaborar para hacer más importante nuestra Isla. Nuestro lema de #entreTODOSTenerife es una filosofía de trabajo, una manera de entender el valor de la colaboración, un vehículo para canalizar el talento de nuestra gente. Es una herramienta de trabajo.
Tenemos poco tiempo y muchas cosas que hacer. Porque hay que hacer que las cosas sucedan. Nuestro programa Tenerife 2030 está pensado para mejorar a esos ciudadanos del mañana que son hoy nuestros hijos con un programa intenso que mejore la educación integral del escolar y de la comunidad educativa. Becas de inmersión lingüística, para la movilidad, de posgrado fuera de la Isla, para las prácticas profesionales en el extranjero... ¿Qué hace el Cabildo de Tenerife metiéndose en la Educación? Comprometerse. Luchar por hacer de esta isla una isla mejor a través de conseguir mejores ciudadanos.
La educación es una prioridad política. Y desde el Gobierno de Tenerife vamos a lanzarnos con toda decisión en ese escenario que abarca también la cultura y el deporte como instrumentos que permiten la formación integral de mejores personas, más capaces, más sanas, más solidarias, más conscientes de los valores de una sociedad nueva.
¿Y qué hay de los ciudadanos de hoy? Las políticas sociales del Cabildo son las vendas que ponemos en las heridas abiertas de nuestra sociedad. Mayores que necesitan atenciones y cuidados, enfermos crónicos que dependen de centros especializados, familias que carecen de los ingresos mínimos para garantizar su subsistencia... Parte de nuestro esfuerzo tiene que dedicarse a trabajar en cuerpo y alma por quienes más necesitan de la solidaridad de todos. Ya lo hemos hecho durante estos últimos años. Y tendremos que seguir haciéndolo porque las cosas, digan lo que digan, aún no han mejorado para los que peor lo han pasado.
También tenemos que pensar en los que sí tienen trabajo o están en el mercado esperando que surja su oportunidad. Para ellos lucharemos por la segunda pista y nuevas instalaciones del aeropuerto del Sur, por los Hospitales del Norte y del Sur de Tenerife, por los nuevos puertos comerciales y deportivos de Puerto de la Cruz y de Fonsalía y, entre otros proyectos, por las importantes obras de carreteras que aún seguimos esperando en esta isla.
Nos queda muchísimo trabajo. Nos queda hacer que las cosas sucedan. Que lo que soñamos se haga realidad. "Te digo que no vale meter el sueño azul bajo las sábanas", dijo el poeta canario Agustín Millares Sall. En esta isla, la más importante y más habitada de toda Canarias, no vamos a meter bajo las sábanas el sueño azul y blanco. Lo vamos a convertir en realidad con nuestro talento y nuestras propias manos.