El presidente del Gobierno de Canarias, Fernando Clavijo, será recibido hoy en La Moncloa por su homólogo del Ejecutivo central, Mariano Rajoy. La importancia de este encuentro, además de por ser el primero que mantienen ambos líderes, desde que el primero fue elegido presidente del Gobierno canario, viene dada por el momento en el que tiene lugar, que no es otro que en pleno debate de aprobación de los Presupuestos Generales del Estado para 2016. Fernando Clavijo acude a esta cita con un amplio respaldo -no solo político, sino también social, como quedó demostrado hace una semana en la reunión de su Consejo Asesor-, para reclamar a Mariano Rajoy un mayor esfuerzo inversor en las Islas, tanto en infraestructuras como en políticas de empleo, después de cuatro años olvidados por el Ejecutivo del PP, donce nadie ha velado por los intereses de Canarias.

Una petición que el presidente del Gobierno central deberá asumir, no para hacer un favor al Archipiélago, sino con el claro propósito de dar a Canarias lo que se merece y está plasmado en su Régimen Económico y Fiscal (REF). Es cierto que los presupuestos del próximo año, si se comparan con los de 2015, recogen un incremento de las partidas destinadas a las Islas, pero insuficiente, y así ha sido reconocido tanto por CC y PSOE como por destacados dirigentes del PP en el Archipiélago.

Canarias no quiere limosnas, sino que se haga justicia y que las cuentas públicas del Estado recojan lo que necesita y corresponde. De no ser así, la brecha con la España peninsular continuará creciendo y la lejanía no solo será física. Las Islas precisan recuperar su plan integral de empleo, devorado por la crisis, y mayores dotaciones para carreteras y otras infraestructuras. Y no porque lo digan una o dos formaciones políticas. Ni tampoco porque lo solicite su Gobierno. Lo demanda la sociedad canaria en su conjunto, en esta ocasión por boca de su presidente. Las altas tasas de desempleo que se registran en el Archipiélago o la situación de marginalidad en la que se hallan muchas familias han de ser motivo suficiente para despertar la conciencia de unos ministros -todos ellos-, que han dejado de lado a esta tierra con la excusa de los manidos recortes. Ha llegado la hora de subsanar los errores cometidos durante la legislatura que ahora acaba. Cuatro años en los que el PP pasó de Canarias.

Rajoy tiene hoy una gran oportunidad para corregir su política con las Islas. Para asumir que la lejanía tiene un coste. Pero no son suficientes las buenas palabras. Debe comprometerse con Clavijo con hechos, para que el gasto estatal se aproxime a lo que al Archipiélago le corresponde y estas Islas reclaman. Tras años sufriendo los embates de la crisis, en un escenario en el que la financiación estatal era claramente insuficiente, ahora que la economía parece dar muestras evidentes de recuperación, ya no existen argumentos que justifiquen el trato discriminatorio que en cuanto a recursos ha soportado Canarias en la presente legislatura. Hacer caso omiso de las demandas que hoy le trasladará el presidente del Ejecutivo canario, en nombre de todos los isleños, sería un error político, pero, sobre todo, una injusticia, porque las Islas solo están reclamando lo que les corresponde.