Hace unos días Carlos Castro Brunetto dejó la presidencia de la Alianza Francesa de Santa Cruz de Tenerife. Tras ocho años de importantísima labor, debido a la exigencia de los estatutos de la emblemática institución, no ha podido presentarse a la reelección.
Hay un antes y un después en la Alianza Francesa de nuestra ciudad con la presidencia del profesor Castro Brunetto. Su irradiación en la vida cultural chicharrera ha sido constante y la difusión de la francofonía también.
Castro Brunetto es además profesor titular de Historia del Arte de la Universidad de La Laguna. Cuando se escuchan, con atención, sus disertaciones que hace sobre temas de su especialidad, con su verbo cálido y su palabra fácil, nos contagia su pasión por enseñar, y cuando dialoga sobre el patrimonio histórico-artístico de nuestra amada tierra, uno queda prendado de conocer a uno de los sabios más apasionados por el arte y la historia de nuestro Archipiélago.
La Asociación Cultural TuSantaCruz le entregó su premio anual correspondiente al año 2014 al profesor Castro Brunetto. Los otros premios que hemos otorgado a aquellas personas o instituciones que se hayan caracterizado por la defensa y difusión de todo el patrimonio cultural de nuestra ciudad son Rosario Álvarez, Wolfredo Wildpret y el Real Casino de Tenerife.
Al profesor activo y aguerrido lo conozco desde hace pocos años, pero he disfrutado con su amistad y, sobre todo, con sus conocimientos. Ya puede ser una prodigiosa explicación de las esculturas del parque García Sanabria, de tallas de imaginería de valor incalculable, que recorren pueblos recoletos en procesiones, silenciosas y respetuosas, impregnadas con ese matiz peculiar que tienen en nuestras islas; ya sea con una disertación sobre moda o una tertulia de asuntos variados, el conocimiento y la palabra del doctor Castro Brunetto irradian gran nivel intelectual y al mismo tiempo ternura y sencillez.
Además, tiene dos amores en los que ha escindido su corazón: el Brasil indigenista, de siglos de otrora, presidido por la figura del Santo Padre Anchieta (personaje al que no se cansa de ensalzar), y la urbe cosmopolita y moderna de París, envuelta en fragancias de lavandas provenzales y la visión de artistas impresionistas, enamorados de la bella Costa Azul.
Durante su presidencia de la Alianza Francesa, el Dr. Brunetto ha establecido multitud de contactos y convenios con la mayor parte de las instituciones públicas y privadas de Tenerife. Además, hace pocos meses tuvo el honor de recibir la Medalla de Oro de la ciudad de Santa Cruz de Tenerife la Alianza Francesa -que ya había sido premiada con el Premio Príncipe de Asturias de Humanidades 2005, junto al British Council y al Goethe Institute-, en reconocimiento a su labor de enseñanza, y cultural y social, durante más de sesenta años de continua estancia en nuestra capital.
Castro Brunetto nos deja como presidente de la citada institución. Pero continuará muchos años irradiando cultura y mostrando a todos los chicharreros sus inquietudes, preparación y saber estar.
"Liberté, égalité, fraternité" serán palabras trascendentales que siempre acompañarán a Carlos Castro Brunetto. Hasta siempre, profesor.
*Presidente de TuSantaCruz