Los muy reprobables comentarios machistas del exconcejal de Mercados, Playas y Cementerios de La Laguna han provocado que en la Ciudad de Los Adelantados dejaran de existir otros problemas. El propio ayuntamiento se vio obligado a suspender -con buen criterio- el pleno ordinario que tenía previsto celebrar el viernes, pues corría el peligro de que todo quedara salpicado por el caso Zebenzuí González. Hay que felicitar a las distintas formaciones con representación municipal por haber alcanzado un acuerdo unánime, acerca de los pasos a seguir con este asunto, pues, en caso contrario, tanto la labor del gobierno local como la de la oposición se hubieran visto lastradas por lo que irradiaba el móvil del edil lagunero. No se trata de restar gravedad al contenido del ya famoso whatsapp. Pero conviene poner las cosas en su sitio. Fuera fruto de una noche de copas un sábado cualquiera del mes de julio, o el resumen de un sesudo análisis plasmado en el chat de unos amigos, lo que debe quedar claro es que el deplorable comportamiento de un concejal no debe paralizar la actividad de un ayuntamiento. Por mucho que quieran algunos de sus integrantes. La condena y reprobación de las manifestaciones realizadas por Zebenzuí González, así como el cese en las responsabilidades que tenía atribuidas y la exigencia de que entregue su acta de concejal son aplaudibles. Y, ante las posibles dudas, el traslado a la Fiscalía de lo ocurrido, por si fuera constitutivo de delito, es suficiente. Flaco favor el que ha hecho a la política y a Aguere el que fuera responsable de Mercados, Playas y Cementerios. Pero su conducta tampoco debe servir para amparar el proceder de algunos pirómanos que amagan, pero no tiran. Y mucho menos para que los intereses de La Laguna y los laguneros se vean perjudicados.

El presidente de la Federación Provincial de Empresarios de la Construcción (Fepeco), Óscar Izquierdo, advertía a principios de semana de que "Tenerife es donde más se presentan proyectos y menos obras se ejecutan", a pesar del "déficit de infraestructuras de todo tipo" que sufre la Isla en estos momentos. Además, alertaba de que "Tenerife está en una situación más precaria que el resto en cuanto a la dotación de equipamientos comunitarios". Aún en el caso de que el líder de la patronal de la construcción pudiera exagerar, los responsables políticos, tanto a nivel regional, insular y local, deberían tomar nota de la situación en la que se encuentra la Isla más grande del Archipiélago en esta materia, para priorizar las inversiones a realizar y, a la vez, agilizarlas. No vaya a ser que en el momento en que se están suscribiendo convenios con el Gobierno central y se promete más financiación, la falta de gestión deje a Tenerife a dos velas.

La ministra de Empleo y el presidente del Gobierno canario rubricaron el lunes el PIEC, que supondrá una inyección de 42 millones de euros para mejorar la empleabilidad de los residentes de las Islas. Habrá que confiar en que a todo ese dinero se le saque el máximo rendimiento y que no se desperdicie ni un euro.