Como si de una gran fiesta mejicana se tratara, nuestros montes se pueden convertir en breve en una gran cantina al más puro estilo del país centroamericano. Y es que resulta que la nueva Ley de Caza que prepara el Gobierno de Canarias pretende dar luz verde a que los cazadores puedan abatir desde burros a caballos, pasando por ponis o camellos. Atrás quedan los muflones y los conejos en toda una suerte de legislación que puede permitir tirotear a cualquier animal que se considere salvaje o asilvestrado. Mientras los cazadores se frotan las manos, los animalistas se las echan a la cabeza poniendo encima de la mesa lo que parece un disparate, toda vez que el propio Gobierno ha prohibido hace unos días las peleas de gallos.

Pero ahí anda doña Blanca, viceconsejera de Medio Ambiente, dándole rienda suelta a la imaginación más fastuosa para convertir nuestros montes en un gran parque temático de tiro a todo lo que se mueva. Imagino esas rancheras sonando por Las Raíces y a los alegres cazadores ataviados con un gran sombrero mejicano gritando un ¡yiiijaaa! por toda la galaxia. Seguro que irán dando tiros al aire con una mano mientras con otras sostienen un botellón de tequila. Y es que si realmente la Ley de Caza tal y como está trascendiendo a los medios ve la luz, despidámonos de los carnavales, porque la fiesta de la locura sin par va a ser la época de caza en nuestras islas.

@JC_Alberto