Ahora que se puede ahogar la Navidad en comidas, compras y bullicio,cuánto me agrada que el libro más vendido en estas fechas sea de biografía y pensamiento, y que transmita una gran interioridad: Pensadoras para el siglo XXI (Rialp). Me alegro como si de un hijo intelectual se tratara, porque pretende contagiar amor y comprensión hacia el ambiente intelectual en el que habitamos para transformarlo y embellecerlo, sin desánimos ni lamentos estériles.

Decía Morris West que "el ejemplo es una lección que todos los hombres pueden leer". Y en esta obra se narra, en primer lugar, la vida de Cicely Saunders, la mujer que supo atisbar que los enfermos desahuciados necesitaban una atención específica, porque en esos momentos la vida cobra una densidad ontológica muy especial. Así, puso toda la ciencia a su servicio, para que murieran sin dolor físico, apoyados psicológicamente, acompañados por sus familias y atendidos espiritualmente. Ella inventó los Cuidados Paliativos que ahora todos conocemos y, para ello, tuvo que empezar a estudiar Medicina a los treinta y cuatro años de edad.

¿Saben por qué Cicely Saunders, trabajadora social que cuidaba enfermos de cáncer, avistó las necesidades de los pacientes terminales, las que ningún médico hasta entonces había percibido? Porque se enamoró de uno de ellos al que quedaban pocas jornadas de vida. Y es que los ojos del amor penetran con más profundidad que los aparatos científicos sobre las dimensiones estrictamente personales.

También se relata la vida de Dorothy Day, una sindicalista americana que siempre estuvo con los pobres, "aquellos hombres grises, del color del suelo". Porque nuestro tiempo no se comprende sin bucear en los movimientos sindicales del siglo XX, con sus luces y sus sombras, con sus resentimientos y con su justicia de fondo. Además, esta pensadora nos instruyó sobre cómo superar la soledad individualista y crear verdaderas comunidades porque, en palabras de Octavio Paz, comprendió que "el hombre es nostalgia y búsqueda de comunión".

Asimismo, para entender el siglo XXI, no conviene olvidar las lecciones aprendidas de la barbarie de Auschwitz, y hasta qué abismos llega el ser humano si deja de buscar la verdad y la donación. Y por ello se describe el ejemplo conmovedor de Etty Hillesum, una judía que fallecerá con veintinueve años en esas cámaras de gas. "Estoy con los hambrientos, con los maltratados y moribundos, cada día estoy allí, pero también estoy aquí con el jazmín y el trozo de cielo ante mi ventana. En una sola vida hay espacio para todo, para creer en Dios y para una ruina miserable", anotará en su sorprendente Diario.

Se aborda, también, la vida de Teresa de Calcuta, quien, desde un punto de vista antropológico, nos enseña la ciencia del amor en grado sumo, que para amar se necesitan disposiciones fuertes, pues solo llena la vida el amor incondicional -"ese chico y esa chica que se enamoran, ese amor es tengo sed. Su amor es sed"-, y que se puede amar hasta que duela.

Por último, se recoge la prosa y la poesía fantástica de Ana Blandiana, una escritora rumana contemporánea que luchó con su pluma contra el materialismo comunista de su país y contra el materialismo consumista y la vulgaridad que vino después. El pasado año estuvo en España y declaró: "Hay un cansancio de tanto consumismo y de tanto materialismo, una toma de conciencia de que los seres humanos para alcanzar la plenitud necesitan algo más que el simple bienestar".

En resumen: la absoluta dignidad del ser humano enfermo, la libertad para vincularse y crear comunidad, la libertad interior personal, la enseñanza para amar con plenitud y la profunda mirada espiritual encarnadas en la vida de cinco mujeres maravillosas.

Por cierto, el libro lo he escrito yo y lo presento este jueves 14 de diciembre en el Casino de Santa Cruz de Tenerife a las 20 horas. Están todos invitados. Les espero.

@ivanciusL