Estamos convencidos de que han de ser los partidos nacionalistas los que lideren en algunas de nuestras islas, no en todas, la carga poblacional y el consumo irresponsable de territorio, pues hoy no existen sino dos modelos para enfrentar el futuro: el desarrollista temerario o el sostenible racional. Y si el nacionalismo es algo, lo hemos recordado siempre, es la defensa de un territorio, de una sociedad y de una cultura.

Todos esperamos lo que la consejera de Política Territorial del Gobierno de Canarias, Nieves Lady Barreto, ha declarado a Álvaro Morales en las páginas de EL DÍA (31/12/17) sobre la nueva Ley del Suelo y su posible uso para sacar adelante proyectos urbanísticos que con la norma anterior tenían dificultades de ser aprobados: "Que sepa, no, aunque depende también de los cabildos y consistorios. En todo caso, un proyecto que no podía salir adelante con la ley anterior, tampoco [saldrá] con esta". Toca repartir responsabilidades entre los tres escalones de la administración sin prejuzgar si esta distribución implicará, "a fortiori", una dejación por parte de cualquiera de ellos.

El informe del Parlamento Europeo respecto al balance y a la futura estrategia con Canarias y el resto de las regiones ultraperiféricas (RUP) elaborado y defendido en 2008 por la eurodiputada francesa del Partido Popular Europeo (PPE), Margie Sudre, planteaba que la futura política común de inmigración prestara -y así ha sido aceptado ahora por la Comisión europea- una atención especial a la situación de estas regiones particulares que son "fronteras exteriores de la Unión Europea" y se encuentran "rodeadas de terceros países menos favorecidos". Circunstancia que conlleva que estén "sometidas a una presión migratoria muy fuerte que, añadida a un crecimiento demográfico a menudo muy superior a la media comunitaria, provoca tensiones económicas y sociales preocupantes", sin referirse a lo que puede suponer, en el caso de Canarias, la recepción de dieciséis millones de turistas anuales.

El 29 de noviembre pasado el catedrático emérito de Botánica de la ULL, Wolfredo Wildpret, concedió una entrevista en la SER a Juan Carlos Castañeda en la que nos alertaba a los tinerfeños de unas amenazas medioambientales que no son nuevas. Según el sabio profesor lagunero, el progreso de Tenerife no saldrá adelante si no se consigue un equilibrio exacto entre la economía y la ecología? En estos momentos estamos valorando más la economía que la ecología y si este equilibrio se rompe la que sufrirá será la ecología? La isla está cada vez más destrozada, la isla está cada vez más habitada, a la isla llegan cada vez más habitantes que están causando un deterioro de la isla en general? Uno ve el impacto que está causando en los recursos naturales de la isla la superpoblación que estamos sufriendo desde el punto de vista de visitantes que llegan y gente que se queda aquí y el espacio es cada vez más pequeño? Repercusiones en parque móvil imparable, carreteras en atascos insalvables, vertidos al mar sin control, déficit de plazas sanitarias y escasez y carestía de viviendas, son algunas de las más evidentes.

Con respecto a nuestra sociedad y en particular al sistema económico que nos sustenta, quizá haya que chequear sin descanso -para percatarnos de que vamos por el buen camino- los instrumentos que encauzan, o pretenden hacerlo, la indispensable diversificación económica de nuestro archipiélago, llámense estos Plan de Acción de Canarias, 2014-2020, Documento sobre I+D+i o Estrategia de Investigación e Innovación para una Especialización Inteligente (RIIS3) y el Plan de internacionalización de la economía de Canarias. Herramientas que permiten al conocimiento abrir sus puertas para que entren las empresas, como dijo en su momento el consejero de Economía, Pedro Ortega, y que nos servirán para atenuar y complementar nuestra actual dependencia de la explotación turística y del sector servicios, con una agricultura estancada y una industria que no acaba de avistar un futuro cierto, aunque el Régimen Económico Fiscal en su dimensión económica, en proceso de aprobación por las Cortes Generales, prevea medidas muy favorables para reorientar nuestro modelo productivo, siempre teniendo en cuenta los criterios de sostenibilidad aludidos más arriba.

2018 puede ser un año decisivo para Canarias, como afirmó en sede parlamentaria el presidente de nuestra Comunidad, Fernando Clavijo Batlle. REF económico, Estatuto de Autonomía actualizado y posible proceso de reforma constitucional en el que hemos de involucrarnos como pueblo diferenciado dentro del estado español.

Los nuevos tiempos que se avecinan y para los que hemos de prepararnos, sin dejar de tener en cuenta sectores de nuestra población como el de los desempleados o el de los que sufren la exclusión social, nos exigen una concepción del desarrollo de Canarias no como un proceso ciego, sino como un proceso que ha de combinar lo que el profesor Wildpret nos decía con tanta reprimenda como didactismo: la armonización del medioambiente y el desarrollo económico, que no el mero crecimiento económico por el crecimiento económico. No acabemos con la gallina de los huevos de oro.

*Presidente del PNC y diputado autonómico del Grupo Parlamentario CC-PNC