Nos dejó el pasado 10 de marzo tras una terrible enfermedad. Con ella se apagó una hermosa voz y el mundo de la lírica se ha quedado sin una artista singular e inigualable, además de una gran pedagoga musical que hubiese cumplido 75 años próximamente.

Sin lugar a dudas ha sido una de las grandes intérpretes de la canción lírica española junto a Teresa Berganza. Tenía una técnica muy depurada y destacaba por su fraseo, pero sobre todo por saber expresar en unos pocos minutos la historia que contaba cantando.

Como aficionado a la lírica y fiel seguidor de la música clásica quiero dedicar las líneas de hoy a una de las más grandes artistas de los últimos tiempos, y recordar algunos momentos en los que coincidimos o tuve oportunidad de escucharla directamente. La primera vez fue en el teatro Guimerá, donde interpretaba "La Traviata de Verdi", en los primeros comienzos del Festival de Ópera que organizaba ATAO. El público la premió con una ovación interminable tras su extraordinaria Violeta. Su voz era joven y fresca, pero destacó por su desparpajo ante un papel de tantas dificultades. Un triunfo absoluto en su tierra que la catapultó para construir su larga carrera por el mundo.

En otra ocasión acudí al 5º Festival de Ópera en Las Palmas para ver a Mario del Mónaco. Era febrero de 1972 y me llevé la agradable sorpresa de oírla cantar el papel de Desdémona de "Otelo" de Verdi en el que era protagonista junto al gran tenor italiano, que casualmente no se encontraba bien durante el estreno y se vio obligado a suspender la segunda función.

Se produce entonces un largo paréntesis en el que no coincidí con ella, era porque estaba centrada en su carrera y viajaba a los principales teatros y salas de conciertos del mundo, donde fue dirigida por ilustres como Rafael Fruhbeck de Burgos, Michel Plasson, Igor Markévich, López Cobo, Helmuth Rilling, Seiji Ozawa, Mario Rossi? y en los que cantó con reconocidas Orquestas: Londres, París, Berlín, Viena, Holanda, Israel, Osaka, Edimburgo, Australia... Su tesitura y sensibilidad expresando en el escenario le permite obtener importantes premios: Lucrecia Arana, Isabel Castelo, Francisco Viñas, Toulouse..., y recibe también honores en su tierra, concediéndole las Medallas de Oro del Ayuntamiento de Santa Cruz y el Cabildo Insular de Tenerife, además del Teide de Oro y la Cruz de Isabel La Católica.

Obtuvo su Cátedra de Canto en Alemania, en Friburgo, y pasó a formar parte del profesorado del Conservatorio de Música de Madrid y de Tenerife, compartiendo las clases con recitales. Tiene además grabaciones con los sellos Zafiro, Columbia, Hispavox, Ohra, Kro y Erato.

En 1991 nos reencontramos en la reinauguración del teatro Guimerá tras su remodelación que coincidía con los 150 años del recinto. Un espléndido concierto de María junto a la Orquesta Sinfónica de Tenerife, dedicado casi en su totalidad a la canción lírica española. Fue un gran éxito para ella y para la corporación al poder recuperar la sala para la ciudad y la Isla. Acudí al camerino a felicitarla por su magnifica actuación, y durante nuestra conversación se quedó mirando fijamente la insignia que colgaba de la solapa de mi chaqueta, una flor de lis que representa el logotipo de la Asociación de discapacitados psíquicos de la provincia, Aspronte, y que recibí por mi labor en la entidad.

Nunca tuve una amistad cercana, pero si conocí a sus padres y tuve mucha relación con su hermano Alfredo de CajaCanarias, que junto con Álvaro Arvelo me prestaron un apoyo incondicional en mis tiempos en las juntas directivas de Atao y de la Zarzuela. La última vez que estuvimos juntos fue precisamente en el auditorio de la Caja hace unos cuantos años, donde estuvimos hablando largo y tendido tras una audición a sus alumnos por parte de Jorge Rubio.

En el estreno de "Don Carlo" en el Auditorio tuvieron la deferencia de dedicarle la representación, pero creo que merece perpetuar su nombre, y para ello propongo que la denominación del Festival actual, Ópera de Tenerife María Orán, al igual que nuestros vecinos han hecho con Alfredo Kraus.

Es una gran pérdida para la música. Mi pésame a la familia y un gran abrazo a su hermano y amigo Alfredo

aguayotenerife@gmail.com