El pasado día 15 de marzo tuvo lugar en el barrio madrileño de Lavapiés unos disturbios callejeros como consecuencia de la muerte, por causa de un ataque epiléptico, de un inmigrante senegalés dedicado a la venta ambulante. Este lamentable suceso vuelve a poner de actualidad la actividad irregular del "top manta", la de los "manteros" y sus consecuencias. Hablemos de ello.

La expresión popular "top manta" se utiliza para referirse a la actividad de mostrar y vender productos de imitación y falsificación en la calle a precios muy por debajo de los originales, como ropa, bolsos, perfumes, relojes, discos de películas, música o juegos. Y la palabra "mantero" se aplica a quien se dedica a este negocio.

La gran preocupación actual de las industrias es la piratería callejera, entendiéndose como tal cualquier acto por el cual se lleva a cabo una explotación de derechos de propiedad intelectual, industrial, etc. de manera ilícita con el fin de eludir el cumplimiento de la ley. Los compradores de artículos falsos lo hacen, en su mayoría, a través de inmigrantes sin papeles y sin ningún tipo de licencia. Toda la mercancía se exhibe en una manta o tela a modo de escaparate. Las mafias que utilizan a estos inmigrantes como mano de obra barata, se han multiplicado. Además, a través de ellos aplican el mejor marketing, el de la compasión que suscitan entre los compradores, quienes prefieren dar su dinero a personas necesitadas antes que a tiendas, comercios o bazares. Incluso hay quienes lo justifican con argumentos tan poco convincentes como diciendo que es preferible que se ganen la vida vendiendo mercancías en vez de dedicarse al tráfico de drogas o a robar. Sin embargo, las autoridades policiales y las ONG, muy preocupadas por la situación de esta gente, aseguran que en realidad se les hace un flaco favor, ya que la clandestinidad que rodea al mundillo del top manta provoca la aparición de estas mafias que no solo vulneran la ley que protege la propiedad industrial, intelectual, etc., sino también los derechos fundamentales de las personas a través de la explotación laboral y del tráfico de inmigrantes. Téngase en cuenta que el dinero generado por este ilegal comercio, lejos de contribuir a la economía del país, sirve para financiar y enriquecer a estas mafias.

Pocas personas saben los perjuicios que esta actividad supone y qué hay detrás de cada camiseta de fútbol, zapatillas, perfumes, bolsos, etc., que adquieren en el mercado negro del "top manta". De una parte lo que se ve en la calle, la del "mantero" y el mercadeo. De otra las redes que hay tras este mercado, las mafias que usan y abusan de inmigrantes irregulares, sin recursos, para llevarse grandes beneficios sin exponerse.

Entre los artículos más demandados en este mercado ilegal está la ropa de marcas falsificadas, sobre todo las camisetas de fútbol del Real Madrid y Barcelona. También se venden las falsificaciones de zapatillas de deporte de las marcas mas punteras y caras. Pero este es un timo porque se paga menos por un producto que es de un material de escasa calidad que no ha pasado control alguno. Por ejemplo, al sistema le cuesta cinco euros producir unas zapatillas de marca y el "mantero" las vende luego por veinte euros, el margen es amplísimo. El que compra piensa que está adquiriendo una ganga porque no se gasta los setenta, ochenta, noventa o mas euros que valen las auténticas, pero en realidad le están engañando. Lo mismo ocurre con los demás artículos falsificados.

El "top manta" es un fenómeno que no llegará a desaparecer porque siempre habrá alguien que no tenga nada que perder (los inmigrantes) y alguien que tenga mucho que ganar (las mafias).