No es lo mismo ser creativo que tener ideas originales. Necesitamos fomentar la diversidad de pensamiento en lugar de la conformidad. Cuando profundizamos en un asunto debemos hacerlo con la perspectiva suficiente para mejorarlo.

Al fin y al cabo, el éxito no consiste en ser siempre el primero, sino en aprovechar adecuadamente las oportunidades que se nos presentan.

Para ello, debemos escuchar a la sociedad o al mercado, para luego explicar lo que ofrecemos de manera sencilla, así fortalecemos nuestra resiliencia para encontrar las soluciones necesarias.

Adaptarse, sin razón aparente y de manera permanente, mata cualquier progreso y para ello debemos tener presente la premisa de que ser original es la suma de ser creativos, observar las novedades, pergeñar su utilidad y ser capaces de realizarlo para convertirnos en emprendedores.

Justificar lo preestablecido no es otra cosa que un analgésico emocional que nos roba la posibilidad de considerar formas alternativas y más competitivas para el funcionamiento de la economía y la sociedad en general.

Debemos enfrentarnos a lo conocido con una nueva perspectiva que aporte nuevas soluciones a problemas antiguos, pues adaptarnos a un modelo acabado nos hace propensos a fracasar.

Así las mismas herramientas, como el REF, o nuestra condición RUP, deben readaptarse, rápida y permanentemente, a la realidad de las demandas económicas y sociales de Canarias porque su fin último consiste en dar respuestas eficaces a la prosperidad de las familias y a las esperanzas para acabar con el desempleo.

Ignorarlo es un lujo que nadie se puede permitir.

*Vicepresidente del Consorcio de la Zona Especial Canaria