La sociedad civil está bien representada en el Sur de Tenerife por distintas agrupaciones como el Círculo de Empresarios del Sur de Tenerife (CEST), o por el Foro de Amigos del Sur de Tenerife (FAST). El objetivo común es eliminar el mayor número de trabas o problemas que tienen por resolver y que no son pocos. Y, de un tiempo a esta parte, el Sur ha asumido un protagonismo mediático que no tenía y ha dejado claro, para el resto de la Isla y para la clase política, que ellos tienen los mismos o mayores problemas que el Norte de la Isla. Y si bien no son el rey Midas, sí han dado una visibilidad a sus necesidades en relativamente poco tiempo de la que el Norte ha sido incapaz. Pero además han acercado el Sur, que desde hace mucho tiempo, y hoy algo todavía, parece que es más de otros que nuestro.

Sin embargo, fuera de la política, el Norte sigue en las mismas: sin un líder que represente sus grandes demandas, curiosamente, son muy similares a las del Sur: infraestructuras y carreteras intransitables, un hospital comarcal y, en el caso del Sur, además, una terminal aeroportuaria que da vergüenza. Quizás no le haga falta, pero hablando con un importante empresario del Norte me contaba que necesitaban unión y un líder que haga ver sus lastres más aún. Y, curiosamente, se comparaban con el Sur para su justificar su desdicha de la desunión. El otro día coincidí en El Día Televisión con el alcalde de Icod, José Ramón León, que me contaba ante esta situación que él intentó que ese reto fuera posible, pero que las envidias eran tan grandes y de tantos lados que se retiró del asunto. Y uno piensa que el Norte seguirá siendo el hermano quejica de la Isla, en tanto en cuanto sus distintos sectores no se unan y dejen sus diferencias a un lado. Por lo menos para empezar a empujar, digo yo.

@JC_Alberto