La cohesión de Canarias como sociedad y como ente político-administrativo ha experimentado en las cuatro décadas constitucionales un progreso permanente, aún más con el nuevo Estatuto y el Régimen Económico y Fiscal (REF). La realidad de los hechos señala a ciudadanos e instituciones el camino recto y las opciones idóneas cuando la inteligencia percibe creativamente los cambios y transformaciones de nuestro entorno.

Cohesión no es uniformidad ni unitarismo, sino suma voluntaria de medios y fuerzas para alcanzar los mejores estadios del desarrollo. El recién alcanzado acuerdo entre las empresas editoras de EL DÍA y La Provincia-Diario de Las Palmas y La Opinión de Tenerife abre una etapa de puesta en hora de la comunicación social en el Archipiélago y su identificación con las corrientes progresivas del mundo actual. Tal es el agrupamiento de los entes económicos y socioculturales afines para salir de la atomización societaria y reforzar en presente y futuro la estabilidad y operatividad de su servicio al común de los ciudadanos.

La vocación de este acuerdo es, precisamente, consolidar la responsabilidad del sector en Canarias. Los mensajes informativos y las aportaciones críticas de nuestros medios, escritos y digitales, radiofónicos y televisivos, se legitiman cada día en los preceptos de la verdad, la defensa de la libertad y el bien del pluralismo. Son diversos pero cohesionados en la lucha por el perfeccionamiento de la convivencia, respetando exquisitamente lo que prima en cada una de las partes de nuestra Autonomía, sin menoscabo de ninguna.

El quehacer diario suele conjugarse en valores de hoy y de mañana. Tal vez por ello no volvemos la mirada al acontecer del pasado inmediato para dimensionar con justicia la profundidad del cambio operado en la democracia española y, por tanto, en esta frontera sur del Estado abierta a tres continentes. El Régimen Económico y Fiscal y el Estatuto de Autonomía han evolucionado sin descanso desde que fueron promulgados. La integración europea, sus normas y fondos estructurales añadieron riqueza y opciones de trabajo, además de ordenar los intercambios en aras del equilibrio de casi treinta estados, con sus especificidades nacionales y regionales. No todo es perfecto ni está plenamente garantizada la cobertura integral de las necesidades, pero la unidad de las empresas de comunicación líderes de Canarias probará, como es natural, la mejor defensa de los intereses generales y de las características insulares.

Todos estos cambios desembocan por ahora en un capítulo de importancia primordial, que es el de la representación política de cobertura regional, sumada a la insular. Este punto tan sensible en la convivencia canaria inicia ahora su perfeccionamiento en la regionalidad efectiva de la Autonomía y supone un avance inspirador para todos. La coexistencia de lo regional como estructura de lo insular es una conquista cohesionadora con la que puede parangonarse el feliz acuerdo de nuestras empresas informativas.

Ambas han trabajado muchos años por tener presencia profesional en la provincia hermana. Esos intentos han tenido desigual fortuna, pero quedan hoy incorporados a la cultura de las dos empresas por un acuerdo amistoso que abre nuevos tiempos y nuevos logros en la estabilidad del Archipiélago. Todos, propietarios, gestores, profesionales y técnicos, de allá y de acá, lo celebramos con satisfacción y renovadas ilusiones.