MIENTRAS cantantes como Plácido Domingo o Peter Schreier han terminado subiendo a los podios orquestales, el tenor austriaco Julius Patzak hizo el camino inverso. Nacido en Viena el 9 de abril de 1898, estudió contrapunto, composición y dirección de orquesta a fin de desempeñar este último oficio. Fue después de la primera guerra mundial, mientras dirigía una compañía de danza, cuando decidió aprender canto por su cuenta. Debuta como el Radamés de "Aída" en 1926, en la plaza bohemia de Reichenberg. De ahí pasa al teatro checo de Brno, desde donde da el salto a la Ópera Estatal bávara, en Múnich, donde se consolida gracias a su interpretación de Riccardo en "Un ballo in maschera", de Verdi. En el foro muniqués canta entre 1928 y 1945. Tras la Segunda Guerra Mundial será otra ópera estatal, la de Viena, la que le acoja. Allí estará durante casi quince temporadas, en la que se confirma como un excelente mozartiano, ratificando los pronósticos que habíasuscitado en Salzburgo. Patzak abordó a los maestros alemanes de todas las épocas, desde Bach a Pfitzner, pasando por Richard Strauss y Beethoven, cuyo "Fidelio" representa en Salzburgo en 1948, bajo la batuta de Furtwängler.

Considerado el sucesor de Karl Erb en los campos del oratorio y el lied, Julius Patzak fue también profesor. Impartió en el Mozarteum de Salzburgo y en la Academia de Música de Viena, donde acabaría sus días como docente tras su retirada en 1966.

En su discografía hay una referencia atesorada por todos los melómanos: la grabación de "La canción de la tierra", de Gustav Mahler, que Bruno Walter dirigió en 1952, en la que Patzak tuvo como compañera de viaje musical a la gran Kathleen Ferrier.

El tenor austriaco, casado desde 1931 con Maria Walter, nieta del también cantante Gustav Walter, pasará a la historia tanto por dicho registro como por una voz quizá no muy poderosa, pero con la que cincelaba cada una de sus interpretaciones, muy precisas en lo técnico y atentas siempre al aspecto dramático, como demuestran los ciclos de canciones dedicados a Schubert y Mahler.