Tenerife Espacio de las Artes (TEA) clausura este domingo la exposición "Landscapes-Tenerife", de Thomas Ruff. Esta muestra, que invita al visitante a pasear su mirada por cuarenta y dos de las creaciones que el artista alemán ha realizado desde 1980 hasta la actualidad, forma parte del programa expositivo de la X edición de la Bienal Internacional de Fotografía de Tenerife Fotonoviembre, abandonará el centro santacrucero tras haber permanecido en él casi dos meses.
En su propuesta, Thomas Ruff descubre una serie diez obras de gran formato creadas expresamente para el TEA, piezas en las que muestra, bajo su óptica particular, distintos rincones y parajes de la Isla, entre ellos un bosque de laurisilva, el Valle de Ucanca y la playa de Las Teresitas.
"Landscapes-Tenerife" (que podrá visitarse de 10:00 a 20:00 horas) se completa con treinta y dos imágenes del propio Ruff pertenecientes a épocas anteriores que permiten conocer algunas de sus series más emblemáticas como "Porträt" o "Substrate".
Destino, la biblioteca
Tras la clausura de "Landscapes-Tenerife", la decena de imágenes que Ruff ideó para el TEA se colgarán en una de las paredes de la biblioteca de este centro de arte dependiente del Cabildo de Tenerife.
El gran muro del fondo de la biblioteca será la ubicación definitiva de estos paisajes tinerfeños en los que el fotógrafo alemán ha querido dejar claramente impresa la huella de la tecnología. A través de este modo de proceder, de estas imágenes pixeladas, el creador cuestiona el propio medio fotográfico y sus contextos de recepción.
Thomas Ruff (Zell am Harmersbach, 1958) está considerado como el fotógrafo más relevante de la famosa escuela alemana de los noventa.
Su relación con la arquitectura se inicia a raíz de sus trabajos con fotografías de viviendas sociales alemanas durante la década de los ochenta. En 1992 comienza a colaborar con el estudio de arquitectura de Herzog & De Meuron -los arquitectos que junto a Virgilio Gutiérrez diseñaron el TEA-, fotografiando sus edificios y estudiando su interacción con el entorno.
Sus imágenes arquitectónicas de carácter serial, formato monumental y extrema precisión ya son parte del legado visual de las últimas décadas, enriquecido por sus incursiones en géneros como el interior, el retrato o el desnudo.