EN ESTE AÑO en que se conmemora el Centenario (1910-2010) de nuestra entidad, se ha cumplido un sueño largamente acariciado por CajaCanarias: desde el pasado 12 de marzo se muestran en la Sala María Rosa Alonso de La Laguna, con carácter permanente, las obras más destacadas de uno de los fondos de arte más importantes de Canarias, la Colección de Arte CajaCanarias. Los cuadros y esculturas que la integran conforman un valioso legado que, en el arranque de las actividades vinculadas a nuestro Centenario, depositamos en esta ciudad singular, vinculada a nuestra historia. No en vano, CajaCanarias abrió en La Laguna, en 1968, su Sala de Arte, el primer espacio cultural con que contó la ciudad. En aquellos años se realizaron varias exposiciones en las que participaron artistas del grupo Nuestro Arte, como María Belén Morales y Pedro González. Y fruto de la intensa actividad expositiva que la Obra Social y Cultural ha venido desarrollado en el Archipiélago, se fue consolidando nuestra colección de arte, gracias a la generosidad y a la complicidad con nuestros artistas.

Las obras que se podrán ver en la Sala María Rosa Alonso abarcan el periodo comprendido desde comienzos de 1900 hasta finales de la década de 1980, y nos permiten acercarnos a la raíz de nuestro arte: desde los pintores que integraron el Regionalismo, como Romero Mateos, a las propuestas de las vanguardias históricas. Desde las formas simbólicas del universo atlántico de Néstor de la Torre, a la violencia de los sueños de Óscar Domínguez. Desde los artistas como Juan Ismael, José Julio Rodríguez y César Manrique, que buscaron una nueva expresión sin ataduras, a los caminos más personales de José Dámaso, Pedro González, José Abad o Cristino de Vera. Desde el Informalismo de Manolo Millares a los artistas pertenecientes a la Generación del 70.

Debemos destacar que este espacio nace con una fuerte vocación didáctica. Aspiramos a estimular en los alumnos el conocimiento del Arte Contemporáneo en Canarias, desde la búsqueda del despertar intelectual, cuidando los contenidos y las herramientas para motivar la curiosidad de nuestros jóvenes hacia los movimientos plásticos que definieron todo un siglo. Pero este proyecto no termina aquí. Cada año iremos enriqueciendo, en sucesivas revisiones, sus contenidos, completando épocas con nuevas adquisiciones que irán consolidando la Colección de Arte CajaCanarias, desde hoy vinculada al extraordinario legado cultural de la ciudad de La Laguna, como uno de los recorridos más apasionantes del arte canario del siglo XX.

Se reivindica así, con esta muestra, el lugar que nuestros creadores ocuparon en el tiempo de las vanguardias históricas, así como el papel central que destacados pintores y escultores jugaron en los movimientos artísticos transformadores del siglo. De forma paralela, esta oferta cultural pasa a formar parte de un enclave estratégico para la ciudad de La Laguna, como es el eje que forman el teatro Leal y la iglesia de La Concepción, y se consolida, a su vez, con la actividad cultural desplegada desde el Ayuntamiento de la ciudad y desde otras tantas instituciones señeras y aledañas que forman parte de la identidad lagunera: el Orfeón La Paz, el Ateneo, el Instituto de Estudios Canarios o la Universidad de La Laguna, entre otras.

A este rico y variado mapa cultural debemos añadir otro núcleo de vital importancia para La Laguna: la "milla de Oro", que conforma la calle de San Agustín con el Museo de Historia y Antropología de Tenerife, el Centro de Documentación de Canarias y América (CEDOCAM), la Real Sociedad Económica o la Fundación Cristino de Vera, otro de los espacios culturales con que cuenta CajaCanarias en la ciudad de La Laguna. Inaugurado por los Reyes el pasado 23 julio, este centro de arte alberga dos salas de exposiciones: una destinada a exponer de forma permanente obras de Cristino de Vera; y otra destinada a acoger exposiciones temporales de artistas cuya obra muestre una coherencia plástica con la del pintor canario. Por la Fundación han recalado ya la genialidad creativa del escultor Eduardo Chillida y la maestría de la composición y el dominio de la luz del pintor Luis Fernández.

Todo este entramado cultural aquí referido ha contribuido a alentar y a mantener vivas las iniciativas culturales que han hecho de esta ciudad lo que es hoy: un tesoro para todos los canarios, un lugar abierto al mundo, a la ideas universales, que se sabe orgullosa de ser Ciudad Patrimonio de la Humanidad. Hemos realizado un largo camino para dar a la sociedad un espacio que, desde hace algunos años, lleva el nombre de María Rosa Alonso. Ella conoció y alentó las carreras de algunos de los artistas aquí representados, que hoy regresan a la que consideramos su casa. Podemos afirmar, sin ningún género de dudas, que la sinergia existente entre La Laguna y la Caja General de Ahorros de Canarias es resultado de un largo recorrido en el tiempo, de la integración de toda una serie de elementos que han dado como resultado algo grande: juntos, entre todos, hemos sido capaces de crear propuestas culturales de futuro y de alcanzar, a medio-largo plazo, una identidad reconocible del valor cultural. Hemos propiciado, en definitiva, que la sociedad canaria pueda disfrutar del patrimonio cultural, en el sentido más amplio del término, pues la sociedad es, en definitiva, la destinataria y la propietaria de nuestro acervo cultural.