Jordi Isern Jubany (Barcelona, 1969) cumple dos décadas en el mundo del arte y lo celebra en Tenerife, el lugar del que se enamoró hace once años. Hasta el próximo martes podrá ser visitada su exposición de óleos en el Círculo de Amistad XII de Enero. Isern, pintor de gran prestigio a nivel nacional e internacional, asegura que, además de "unos paisajes únicos", lo que más aprecia de Canarias es "su gente".

Jordi Isern tiene un detalle con todo aquel que compra su obra. Además de permitir el pago durante un año sin intereses, le regala una bella litografía con la imagen del Teide y un tajinaste. Tenerife siempre está presente en la obra de este pintor catalán.

¿Por qué celebra sus veinte años de trayectoria en Tenerife?

Llegué a Tenerife por una casualidad increíble. Me llamó un señor, que luego supe que era el crítico de arte Joaquín Castro San Luis. Me dijo que había visto mi obra en un catálogo, que lo dejara todo y viniera a la Isla porque me iba a ir bien, aunque no me ofrecía garantías. Estaba recién casado, nunca había estado antes y aún no sé cómo me convenció, pero me lanzé a la aventura. Luego me enamoré de los paisajes de la Isla, pero, sobre todo, de sus maravillosas gentes.

¿Cuántas veces ha expuesto en Santa Cruz?

Esta es la sexta vez. La primera fue en 1999 en el Casino, donde repetí con la segunda, para luego exponer en el Puerto de la Cruz. Ya es la tercera que hago en el Círculo de Amistad XII de Enero, a cuyos responsables tengo que agradecer la ayuda y el trato recibido siempre. Estaré veintitrés días muy contento de poder compartir mi tiempo con ustedes.

¿Cómo define su relación con la isla de Tenerife?

Como algo muy profundo. Y se nota en lo que pinto porque es imposible hacerlo sin reflejar el sentimiento que me producen los paisajes únicos de esta geografía.

¿Dónde están los mejores paisajes de la Isla?

Para mí en el Norte, incluyendo al Teide y el Valle de Ucanca, en la zona de Anaga y por encima de Los Rodeos. Suelo exponer aquí cada dos años y cuando no lo hago siempre viajo para observar posibles escenarios de los cuadros.

¿Cómo definiría su estilo?

Mi estilo es figurativo y cercano al realismo. He traído treinta y seis óleos; de ellos, una docena representan paisajes de Tenerife y el resto corresponden al Pirineo de Gerona y Lérida.

¿Cuál es su método de trabajo?

No puedo trabajar sin música y depende del estado de ánimo que ponga un estilo u otro. Necesito estar solo y concentrado. Además, siempre pinto sobre algo que he visto, necesito la perspectiva física del modelo a reflejar. Considero que un cuadro es la conjunción de un momento mágico entre el estado de ánimo del autor y la luz. He pasado muchas veces por un sitio sin encontrar esa chispa necesaria.

¿Qué es lo que más aprecia de Tenerife y de Canarias?

La gente. Su carácter abierto y humano. Espero que nunca lo pierdan porque es una virtud. Salí con 28 años de una selva, Barcelona, donde trabajaba en una empresa familiar de Artes Gráficas para buscar la paz que tengo aquí y en mi pueblo de Alcover.