Un barrio localizado en la periferia del municipio portuense fue el destino elegido por dos artistas zaragozanos, Carmen Marcuello y Jesús Molina, para hacer realidad uno de sus sueños: montar una sala de arte alternativo.

Punta Brava era el enclave perfecto para fundar un taller creativo pero, cuando conocieron Tenerife, se percataron de que todas las salas de arte que existían eran de titularidad pública y que los artistas, sobre todo los jóvenes, tenían muchas dificultades para acceder a ellas. A partir de ahí, cambiaron su idea y desestimaron el taller creativo, cuyo proyecto reemplazaron por la sala de arte de vanguardia Fleming 4, según explica Rita Expósito, gestora del espacio.

Tras el regreso de los fundadores del proyecto a su ciudad natal la responsabilidad ha recaído en tres pilares fundamentales: los comisarios, Lucía Bencomo y Adrián Lee, y la citada gestora.

Fleming 4 (que toma su nombre de la calle y el número en que está ubicada la sala) ha facilitado que artistas con dificultades para exponer hayan encontrado un ámbito accesible y abierto al arte alternativo. "Creo que este proyecto ha hecho que el norte de Tenerife se convierta en un referente de arte vanguardista. Hemos dado una oportunidad a jóvenes artistas y ayudado a otros a consolidar su carrera", precisa Adrián Lee.

Artistas de la talla del grafitero Víctor Pacheco, Davinia J. Gopar, Hossein Ghavaedy, Adassa Santana o, actualmente, Lucía Bencomo, que presenta sus obras bajo el título "El eterno retorno", son sólo cinco de los creadores que a lo largo de los últimos tres años han colgado sus obras en las paredes del recinto.

Durante ese periodo expresiones como la fotografía, la pintura, la escultura o el audiovisual han encontrado su hueco dentro del espacio alternativo. "No resulta complicado encontrar personas que deseen exponer, lo difícil es mantener los estándares de calidad. Queremos mantener una línea expositiva que sea innovadora, transgresora y que tenga calidad técnica, para lo cual debemos trabajar mucho", aduce Adrián Lee.

Las iniciativas que la galería Fleming 4 lleva a cabo son muy populares. Así su mercadillo navideño, "Arte 100", busca que personas que visitan la sala durante el año y no tienen capacidad económica puedan acceder a las piezas a precios asequibles. "Trabajamos con los artistas que ya han pasado por aquí, ofreciendo sus piezas a bajo coste", agrega Rita Expósito, quien recuerda: "Las pasadas navidades el mercadillo tuvo mucho éxito, por lo que decidimos repetir".

Además de dar soporte a artistas emergentes y de poner en marcha propuestas innovadoras, la sala colabora con otros espacios culturales como el Espacio El sótano, del Círculo de Bellas Artes, en Santa Cruz, o con la sala Aperitivos Visuales de La Orotava.

"En agosto hemos llevado a cabo una iniciativa muy bonita con el barrio. La asociación de vecinos quería realizar una exposición con fotos antiguas de Punta Brava y ha recurrido a nosotros buscando un espacio. ¡Nos ha hecho mucha ilusión! Nos sentimos parte del barrio y que recurran a nosotros demuestra que ellos también lo sienten así", afirma Expósito.

A pesar de los logros alcanzados, el apoyo de la Administración es escaso, ya que sólo han recibido una subvención en estos tres años.

"Si me das a elegir me quedo con la iniciativa de Carmen y Jesús. Ellos ya no están para disfrutar del proyecto, pero siguen confiando en nosotros. Gracias a su esfuerzo económico, seguimos aquí a pesar de la crisis", sentencia Rita Expósito.