¿Qué ocurre cuando el cuerpo se marcha?, sobre este tema profundiza la artista canaria Raquel Ponce en su nueva muestra "Corpografías. Seiscientos tres metros" expuesta en el Tenerife Espacio de las Artes (TEA).

Sobre las huellas que deja un cuerpo en las sábanas de una cama o el rastro de perfume que queda en una habitación, versa esta exposición, compuesta por tres vídeos y diversos dibujos creados con cinta de PVC roja, explicó hoy en rueda de prensa la comisaria de la exposición, Ángeles Alemán.

Inspirada en la obra "Desnudo bajando una escalera" de Marcel Duchamp, quien a partir de imágenes superpuestas trata el movimiento de un cuerpo, Raquel Ponce comparte con el cubista francés este interés por la repetición incansable de la acción.

Por este motivo, Raquel Ponce ha hecho un vídeo de 15 minutos en el que, frente a un fondo blanco y acompañada por la música de Bach, ella misma se mueve y va marcando sus propias huellas con "palitos rojos" que dejan la impronta, explica la artista en declaraciones a Efe.

Este vídeo instalación, que representará hoy durante la inauguración de la exposición, es una forma más de "incidir una y otra vez en la huella y en el cuerpo", agrega Ponce, quien ha utilizado un enfoque cenital para provocar "extrañamiento y misterio".

De esta manera también se acerca al surrealismo del belga René Magritte, quien a comienzos del siglo XX se esforzó por romper con la percepción preconcebida de la realidad con su realismo mágico, detalla la artista.

Para ella, el cuerpo no es algo bello que contemplar, sino un instrumento "funcional y práctico" que ejecuta y provoca movimientos, es decir, "huellas que permanecen a lo largo del tiempo".

En la sala Área 60 del TEA, utilizada como plataforma para jóvenes creadores y donde hoy expone Raquel Ponce, también se muestran líneas rojas a modo de dibujos que contornean las diferentes posiciones del cuerpo de la artista, mientras que en otras paredes las siluetas que aparecen corresponden a distintas personas.

"Nuestro cuerpo no acaba en el cuerpo visible", reza la tarjeta de presentación de la muestra de Raquel Ponce, quien en su obra "Corpografías" incide en "la huella como residuo, como forma de ausencia", detalla la propia artista.