EN PRIMER LUGAR, Presidente, felicitarte en nombre de todos los españoles y los canarios que te han votado. Eres uno de los políticos del país con más sacrificada y larga trayectoria profesional, tu llegada a la Presidencia del Gobierno es absolutamente merecida y buscada, y decimos buscada, porque en estos momentos en que España entera y todo nuestro archipiélago son un solar con piedras de penurias, con escombros de ruina y con muros de alejamiento de toda esperanza, se necesitaba de un proyecto nuevo, rápido y eficaz, para poder sobrevivir y no ser un lastre en Europa sino un miembro más con toda la dignidad que siempre hemos tenido.

Séneca dijo: "Sin esperanza no es posible vivir" y Sigmund Freud dejó claro que: "Tan importante es el pasado como el futuro", por eso los españoles y los canarios que te han elegido creen en tu proyecto de salvación, por cuanto significa de cambio radical con la equivocada, insegura y débil política que en los últimos y largos años hemos sufrido.

Mariano Rajoy, Presidente, estamos muy lejos, demasiado lejos para que nuestros problemas tengan un eco justo dentro del hemiciclo, esto sin mencionar a los representantes políticos que enviamos en busca de ayuda y a los que el hábil de Zapatero les entregó, como moneda de cambio, un cesto de mimbre lleno de nuestra agua atlántica como pago y nos trajeron, al salir del avión, el cesto sin una sola gota de nuestra agua. ¡Gracias, gobierno socialista, por nada!

Presidente, el país lleva años suplicando un cambio y en estos días lo piden de rodillas los millones de trabajadores en paro que están a muchos kilómetros de la urbe de la capital, pero nosotros no estamos a kilómetros, estamos a "nudos," no ya de argot marinero sino de la soga que nos ahorca.

Presidente, nuestros edificios y monumentos históricos se van derrumbando por falta de la imprescindible aportación económica precisa.

Presidente, Canarias tiene posibilidades propias para salir adelante sino fuera por el pago marital insufrible al que venimos siendo sometidos.

Presidente, los canarios que te han votado, una significativa mayoría, te felicitan por tu nombramiento y esperan, con ansiedad, que nos visites para conocer de forma auténtica e in situ, cual es la situación en que se encuentra este archipiélago, y entretanto con los brazos abiertos y la sonrisa en nuestros rostros ¡Felicidades, Presidente!