El historiador e investigador Agustín Guimerá Ravina (S/C de Tenerife, 1953) explora en su novela "Tenerife, la nueva frontera" la epopeya de la conquista de esta isla, la última sometida a la corona española, en clave literaria. Guimerá relata la creación de una nueva sociedad surgida de la mezcla de guanches y castellanos con la característica de ser un espacio geográfico "limite" ante un Nuevo Mundo aún por descubrir.

Las vicisitudes del encuentro entre dos sociedades muy diferentes -la aborigen y la de los conquistadores- son analizadas por el autor a través de una trama en la que hila la aventura, el heroísmo, el amor, el odio, el poder o la intriga. Todo ello en el marco geográfico del Archipiélago, abierto al Atlántico, y en el momento en el que Canarias se incorpora con cierta violencia al mundo europeo y a los tiempos modernos.

Guimerá se nueve "a caballo entre la literatura y la historia". Así, trasciende la documentación existente para sumergirse de lleno en la mente de los protagonistas y "entender su visión del mundo", señala. Siguiendo el rastro de la "verdad histórica", el autor da voz y vida al mencey Bencomo, al conquistador Fernández de Lugo y a sus contemporáneos, de tal modo que "son ellos los que explican lo que ocurrió", añade. De ahí la importancia de los diálogos: "Hay poca acción y muchas conversaciones. Me han dicho que hay escenas que parecen escritas para ser representadas en un escenario, cosa que me agradó mucho, pues me gusta el teatro", concluye.

"Tenerife, la nueva frontera", publicado el pasado año, incluye en sus noventa y siete páginas, además del relato que da nombre al volumen, una relación de personajes guanches, un apartado dedicado al vocabulario aborigen y un apéndice de notas históricas.