Los videojuegos y las aplicaciones para dispositivos móviles son algunas de las fuentes de ingresos con más futuro de la industria musical, por lo que se está explorando este terreno con la intención de rentabilizar las inversiones, según los profesionales presentes en el Mercat de Música Viva de Vic (MMVV).

El desplome de la venta de discos físicos y el lento aumento de la venta de música por internet ha obligando al sector a buscar alternativas, tanto en el momento de financiar los nuevos proyectos musicales como a la hora de rentabilizarlos.

En este segundo terreno, los videojuegos son una fuente de ingresos a tener en cuenta porque "es un sector en alza que consume mucha música", según ha asegurado el director del MMVV, Marc Lloret.

En la Jornada Digital 2.0 que se ha celebrado en el Recinto Ferial de Vic (Barcelona), los profesionales han abordado este tema y han destacado la necesidad de contactar con las empresas que se dedican a recomendar música para videojuegos, publicidad o cine.

Estas empresas busca temas musicales ya existentes y ofrecen a los autores unos ingresos extraordinarios que "no son una solución mágica, pero que permite ir sumando y llegar a rentabilizar las inversiones", según Lloret.

Asimismo, los músicos pueden ofrecer sus servicios para crear composiciones para videojuegos, anuncios o películas, "una alternativa que siempre ha existido, pero que está creciendo, especialmente en el terreno de los videojuegos".

Otro terreno con futuro son las aplicaciones para dispositivos móviles, como los que permiten jugar con una melodía y modificarla al gusto.

Un ejemplo en este sentido es el último disco de Björk, que incluye una decena de aplicaciones por separado, todas alojadas dentro una aplicación "madre".

Cada una de las pequeñas aplicaciones está relacionada con una pista diferente del álbum y permite a los usuarios explorar e interactuar con los temas de la canción o, incluso, hacer una versión completamente nueva de ellas.

Asimismo, cada aplicación incluye un juego interactivo relacionado con la canción, la partitura, animaciones y ensayos musicales.

El tema de la financiación también se ha abordado en Vic dentro de la jornada titulada "Innovando en la financiación del sector musical: búsqueda de recursos alternativos".

En este capítulo el "crowdfunding" o micromecenazgo a través de internet "se ha revelado un método eficaz", según el director del Mercat.

Este método ha permitido sacar a la venta los discos de varios músicos presentes en el Mercat de Música Viva de Vic, que arrancó el pasado viernes y finaliza mañana, como es el caso de la multitudinaria banda de percusión Coetus o la consagrada Mayte Martín.

No obstante, las cifras que se recaudan por internet no son muy altas. Así, con este método Coetus consiguió 11.205 euros y Mayte Martín, 20.327.

"Esperaba más reacción", ha reconocido Mayte Martín, que pedía 26.500 para producir y distribuir "Cosa de dos", un álbum grabado en directo en la sala Luz de Gas, con el que la cantaora se ha lanzado a la aventura de la autoedición y autoproducción.

"No hay ninguna fórmula mágica", ha subrayado Lloret, "sólo algunas nuevas maneras de financiarse y de generar beneficios que, sumadas a las antiguas, pueden dar resultados".

Una de las ventajas de la era tecnológica es que las fronteras son más fáciles de cruzar y la música se puede coproducir o vender fuera con más sencillez a través de los portales de internet.

Por esta razón, el MMVV se ha esforzado este año en atraer a programadores y productores extranjeros, y de los más de 600 profesionales presentes en las actividades del MVLab, más de 70 son de fuera de España.