La XXVI Feria del Libro de Santa Cruz de Tenerife, que al parecer este año ha latido al mismo ritmo que la de Las Palmas, se clausura hoy, a las 21:00 horas, tras casi una semana de celebración en el parque García Sanabria de la capital tinerfeña, donde se han instalado treinta y cinco casetas, dos carpas y un escenario para las actuaciones musicales.

Sesenta escritores canarios y una quincena de peninsulares famosos han participado en esta edición, bajo el lema de "Leer te hace libre", clave que han defendido con su presencia en este evento en torno a la lectura y su promoción directa, firmando ejemplares de sus últimas obras a los lectores que pudieran adquirirlas. Quizás fueron los libros más vendidos por este motivo, y los libros infantiles.

La presidenta de la Asociación de Libreros de Tenerife, Remedios Sosa, aseguró que "estoy muy satisfecha con la participación que ha habido tanto de libreros como de público, y por la ventas que han registrado una ligera mejoría con respecto al año anterior. La valoración hasta este momento es muy positiva, porque la afluencia de gente, sobre todo ayer, aunque amenazó lluvia, fue fabulosa. La programación ha sido muy intensa, han estado más de sesenta escritores de aquí y una quincena de fuera. La programación infantil ha estado muy bien. Ha habido dos carpas, la de Agustín Millares Sall, con una exposición sobre él y donde se presentaron libros, y la del Principito, donde ha habido cuentacuentos y talleres, y un escenario para las actuaciones musicales. La verdad es que el parque está muy bonito lleno de libros, de autores y de gente".

También consideró acertada la fórmula de celebrar la feria de Santa Cruz y la de Las Palmas al mismo tiempo. "Así se aprovecha y se ahorra en costes, porque con lo que se ha recortado el presupuesto en cultura, la única forma de enriquecer la feria con la presencia de autores era esta".

Sosa comentó que las dos asociaciones de libreros, la de Tenerife y la de Gran Canaria, siempre han trabajado juntos por "luchar por el libro, porque se potencie la cultura. Somos animadores culturales y jugamos un papel importante en la sociedad. Nuestro sector es uno de los más apaleados por la crisis, porque la gente no tiene dinero y donde primero se recorta es en cultura y por los libros en particular. Después, las instituciones han permitido que sea un sector en el que más competencia desleal existe. Los zapatos los compras en la zapatería, pero un libro lo puede vender todo el mundo. Las instituciones hacen la vista gorda y permiten todo lo habido y por haber en este sentido".

Con respecto al traslado de fechas en Santa Cruz, que en la anterior edición coincidió con las Fiestas de Mayo, indicó que la "ventaja era que el parque estaba a tope y el inconveniente, que no tienes todo el espacio para ti y el libro tiene entidad para dedicárselo todo. La fiesta del libro es la más importante del año, y de todos los días debería de ser".

Desde el punto de vista de Sosa, lo más positivo de la Feria del Libro, "es que, a pesar de la que está cayendo y que la gente está pasando dificultades y no sabe si podrá continuar los próximos meses con las puertas abiertas, es que los libreros siguen con ilusión. Es una profesión en la que amas el libro y luchas por el. Lo más negativo es que el gobierno de aquí y el estatal recorte en cultura, porque la cultura es la única que te hace universal".

Ante las críticas de algunos libreros por la calidad de las casetas habilitadas en Santa Cruz en comparación con la de Las Palmas, precisó que no era para tanto, además de tener en cuenta que en Tenerife los libreros no pagaron nada por el alquiler de los expositores.

"Es verdad que instalaron unos adoquines en vez de unas plataformas para anclar las casetas. Ya nos quejamos de ello casi todos los días, pero ya no se podía hacer nada porque la feria tenía que empezar. Fue un mal menor, porque los libreros las decoraron con los libros y son llamativas. Lo importante es que la Feria ha sido un éxito".