La cantante española Isabel Pantoja ha hecho vibrar esta noche el Pabellón Príncipe Felipe de Zaragoza con su "Hasta que se apague el sol", un nuevo espectáculo en el que ha desplegado todo su arte ante un público entregado, y del que se ha despedido con un "que Dios reparta suerte".

Horas después de que la Audiencia Provincial de Málaga anunciara a Isabel Pantoja que tiene diez días de plazo para su ingreso voluntario en prisión para cumplir dos años de condena por blanqueo de dinero y para pagar una fianza, la artista se ha subido al escenario en Zaragoza arropada por gritos de guapa por parte de sus incondicionales, expectantes ante la aparición de la cantante.

Vestida de negro riguroso, la artista ha salido al escenario casi a las diez y media de la noche y ha comenzado su repertorio con "Para sobrevivir", todo ello después de un vídeo con momentos memorables de Isabel Pantoja, en algunos de los cuales aparecía acompañada de cantantes como Lola Flores, Rocío Jurado, o Manolo Escobar.

Temas como "Pero vas a extrañarme", "A pesar del tropezón", etc, etc, han ido sonando uno a uno para concluir con "El moreno baila" y "Se me enamora el alma", con los que el público no ha dudado en ponerse en pie y acercarse al escenario.

Durante algo más de dos horas de concierto, la cantante ha demostrado su arte, su voz cargada de sentimiento, y su puesta en escena con la que supo conectar con su público desde el principio casi hasta el final, cuando se marchó sin más del escenario, sin hacer ninguna concesión a un entregado pabellón, que le pedía una y otra vez una canción más, que no sonó. Ni una sola.

Al grito de "guapa", "viva la madre que te parió" o "estamos contigo reina", iban sonando las canciones, en alguna de las cuales lanzó sutiles mensajes, como el de que "no me hagan más daño", y que aprovechó para decir cuando entonaba la canción de "Así fue"; o como cuando al acabar un tema el público lanzó un "viva la Pantoja", a lo que ella respondió: "Viva, pese a quien pese".

De la Virgen del Pilar también se ha acordado en varias ocasiones en un concierto, en el que, a pesar de que no se ha llenado el aforo, el público ha sabido arropar a la tonadillera, que se cambió de traje hasta en dos ocasiones, y a la que ya se mostraron señales de apoyo incluso a la puerta del pabellón, mientras hacían cola para entrar, algunos con pancartas de apoyo incluidas.

A partir de 30 euros ya se podía adquirir una entrada para el espectáculo, en el que se han combinado coplas, baladas y flamenco.

La tonadillera tiene programado tres conciertos, uno el 18 de octubre en Huércal-Overa (Almería), otro el 22 de noviembre, en Oviedo, y el tercero el 28 de noviembre en el Palacio de los Deportes de Madrid, respectivamente.

A la puerta había expectación por si este fuera el último concierto de la tonadillera, antes de entrar en prisión, no solo de los múltiples medios de comunicación, que acudieron a cubrir el acto.

La artista fue condenada en abril de 2013 a dos años de prisión, en un proceso en el que también fueron condenados el exnovio de la cantante y exalcalde de Marbella (Málaga), Julián Muñoz; la que fuera esposa de éste, Maite Zaldívar, y otras cuatro personas.

La cantante sevillana, que cosechó su primer éxito en 1982, siempre ha proclamado su inocencia.