El terrorismo de un grupo checheno que quiere atentar contra los intereses rusos y pone en jaque la ciudad de Santa Cruz es el fondo de la quinta novela del escritor canario Mariano Gambín, "Colisión" (Roca Editorial) es un thriller "contra reloj que transcurre en ochenta minutos", según indicó ayer su autor en la presentación, acompañado por la consejera insular de Museos del Cabildo de Tenerife, Amaya Conde.

El novelista explicó que en "juego con uno de los miedos más arraigados en el subconsciente del santacrucero, un accidente en la refinería".

La trama trata del mayor superpetrolero del mundo, el "Rossia", propiedad de una empresa rusa, que tiene previsto su atraque en el puerto de Santa Cruz, viaje en el que dará a conocer las capacidades de esta nueva ingeniería por lo que se invita a autoridades y periodistas a una recepción a bordo.

Al mismo tiempo, unos terroristas chechenos intentan secuestrar el ferri que cubre el trayecto entre Gran Canaria y Tenerife para que, cargado de nitrato de amonio, estalle contra el barco ruso, una explosión que mataría a cientos de personas. Sin embargo, el destino quiere que en el ferri viaje Luis Ariosto (exfuncionario de Haciendas) y su chófer, quienes estarán en contacto con sus amigos, la periodista Sandra Clavijo y el inspector de la Policía Nacional Antonio Galán, viejos compañeros en otras batallas.

"No critico las prospecciones petrolíferas", asegura Gambín, para quien esta historia y la polémica actual "es pura coincidencia", pues la novela tiene un sesgo universal.